El año pasado la eso fuimos a Aquarama, tardamos unos 30 minutos en llegar en autobús, durante el trayecto estuvimos cantando, comiendo chuches (aunque no se pudiera). Y en cuanto llegamos, bajamos rápidamente y con muchas ilusiones, pero tuvimos que almorzar y esperamos alrededor de 45 minutos, hasta que por fin abrieron. La mejor estación para ir a Aquarama, es en verano, que hace calor y el agua no está fría. Una vez abrieron la puerta para entrar, hicimos cola durante 10 minutos más y al entrar nos hicimos unas fotos, más tarde tuvimos que alquilar una tumbona para guardar ahí las cosas. Pero una vez nos pusimos crema solar fuimos a los toboganes a tirarnos y a divertirnos. Había toboganes muy grandes y otros más pequeños, el tobogán rosa es el más grande, junto a dos más que hay que son un poco más pequeños. Como es obvio los toboganes más pequeños son los infantiles, pero eso no implica que sean los menos divertido. Además, hay cuatro toboganes juntos que están muy chulos, son divertidos y se pueden hacer carreras en ellos. En Aquarama hay varios lugares en los que puedes comprarte lo que quieras, creps, granizados, helados, en fin lo que quieras. Es recomendable llevar las chanclas todo el rato, porque el suelo está muy sucio y puedes pillar hongos o cualquier otra cosa. Y cuando te tiras por un tobogán, las coges en la mano y como te tiras con las manos cruzadas hacia el pecho es la manera más cómoda de no machacarte los pies. Porque cuando acabas el día estando en Aquarama acabas cansadísimo, pero si has ido todo el día sin chanclas no solo acabas cansado. También acabas con los pies destrozados. De esta manera puedes pasar un gran día, un día refrescante además de divertido. Y si este día lo pasas con tus amigos, te divertirás mucho más por qué no estarás solo y tendrás compañía con la que divertirte. Lo único malo de esto es que tendréis todos que hacer la cola para tiraros por un tobogán Todos juntos o tiraros de uno en uno.