Almodóvar y la cultura española
Madrid y Barcelona fueron dos ciudades influidas por la cultura norteamericana principalmente mientras el régimen franquista. Por lo tanto, podemos ver esta influencia en películas, moda y cómics tebeos.
Almodóvar no es excepción, ya que fue influenciado por cineastas como, por ejemplo, John Waters, Pier Paolo Pasolini, Stanley Donen, Visconti, Antonioni, Bergman y Alfred Hitchcock.
Aún que no tenga mucha cualificación profesional específica, el realizador veía inúmeras películas. Desde niño que el cineasta aprendió que algo estaba “errado” con él por el modo como era tratado. Su familia y sus amigos siempre le lanzaban ojeados reprobadores. Almodóvar, no sabía lo que reprobaban, sólo que estaba bastante aislado de todo el mundo. Mientras sus amigos se preocupaban con cosas de jóvenes - novias, salir por la noche, hacer deporte, a Almodóvar so le gustaba ir al cine, ver, comprender y estudiar todas las películas.
En los finales de los años 70 y el inicio de la década de 80, surgió en Madrid un movimiento contracultural de jóvenes que se llamaba “La movida madrileña”. Acabada la dictadura, fueron muchos los jóvenes que cambiaron los formalismos de antaño por las salidas nocturnas, al tiempo que dieron rienda suelta a su imaginación y convirtieron nuevas formas de expresión artística en una forma de vida. Así, se rompieron muchas tradiciones culturales y se acabó con la represión. Se dejó paso a las nuevas tendencias, a lo que, por su antagonismo con el régimen anterior, se llamó contracultura.
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Almodóvar junto a su inseperable amigo durante 'La Movida' madrileña Fabio McNamara. Ambos crearon un grupo de punk-glam-rock paródico y con el recorrieron a las salas más famosas de Madrid, convirtiéndose en íconos de una época.
Pedro Almodóvar se trasladó de la España rural para una das las más importantes metrópolis de todo el mundo – Madrid. Es en esta ciudad, en la década de 70, que el cineasta se junta a otros artistas, ya que el régimen franquista estaba decayendo, abriendo así puertas para una sociedad más democrática. Inspirado en el movimiento punk inglés y en la pop art estadounidense, Almodóvar reconfigura la cinematografía española documentando la ansiedad de los jóvenes madrileños con nuevos estilos de vida que os permitía ser más auténticos e libres. Esta realidad estigmatizada como marginal, es su punto de partida.