PASOS. Revista digital del IES Sáenz de Buruaga. Nº 2. Noviembre de 2020. | Page 25

ABRIL

María Cerrato (1897-1981)

Primera mujer veterinaria de España.

Por Helena Corzo Nieto

Nacida de Arroyo de San Serván, se tituló brillantemente en el año 1925 en la Escuela Especial de Veterinaria de Córdoba, tras conseguir un permiso especial de Ministerio de Instrucción Pública porque en el aquel tiempo las mujeres tenían prohibido estudiar esta carrera. Pionera en este campo, fue la primera mujer en España y la tercera en Europa en obtener el título universitario de Veterinaria. En Calamonte, localidad donde murió, le fue dedicada una calle en mayo de 1975.

MAYO

Julia Mayoral Márquez (1902-1983)

Primera alcaldesa de España.

Por Quesia Bermudo Fernández

Nació en Santa Amalia, donde estudió primaria, y luego magisterio en Badajoz, donde se preparó las oposiciones. El 26 de enero de 1933, siendo maestra en Alange, fue nombrada Presidenta de la Comisión Gestora municipal, tras la anulación de los resultados de las elecciones municipales de 1931, cargo este equivalente a Alcaldesa que desempeñó hasta el 9 de mayo de 1933. El nombramiento de Julia como máxima responsable municipal avivó la polémica sobre la intervención de la mujer en la política, por ser aquella una época muy machista, en la que las mujeres aún no tenían reconocido su derecho al voto. Prosiguió su carrera de maestra en otras localidades extremeñas. Finalmente se jubiló en el actual colegio Federico García Lorca de Mérida, lugar donde falleció.

JUNIO

Matilde Landa Vaz (1904-1942)

Símbolo del movimiento feminista contra la dictadura franquista.

Por Jacobo González Rivera

Natural de Badajoz, se licenció en Ciencias Naturales en 1929 en Madrid. Fue una importante militante del Partido Comunista durante la Segunda República y la Guerra Civil. En 1939 fue apresada, procesada en un consejo de guerra y condenada por adhesión a la rebelión. Durante su estancia en el penal de Mallorca, se convirtió en un símbolo de moral para las otras presas, pues prefirió suicidarse y defender sus ideas el mismo día en el que las autoridades religiosas habían previsto su bautismo a cambio de lograr una mejora en la alimentación de los hijos de las presas.