Parques Muralismo Mexicano Revista | Page 4

En 1923 el muralismo se volvió muy conocido dentro y fuera de México. “Los tres grandes” David Alfaro Siqueiros, Diego Rivera y José Clemente Orozco continuaron pintando con los fondos del Departamento de Educación José Vasconcelos hasta que fue él sustituido por José Manuel Puig Casauranc, quien con- tinuó apoyando solamente a Diego Rivera. Eran tiempos de lucha, que inspiraron a Ri- vera para representar los acontecimientos políticos en su mural. Representó al mundo capitalista. A un lado de la tecnología, mos- trando a Charles Darwin y la teoría de la evo- lución, así como la gente de clase baja repri- mida por la gente de clase alta. En cambio, la otra parte de la obra representaba el mundo socialista, donde dibujó a Friedrich Engels, Karl Marx y León Trotski. La parte más po- lémica de este trabajo, fue que pintó a Le- nin en el centro, sosteniendo sus manos con un ruso y un soldado americano negro, para representar la unidad de la nación. Aunque Diego Rivera explicó sus ideas y puntos de vista políticos a Nelson Rockefeller antes de pintar el mural, Nelson le pidió a modificarlo después de haber sido aceptado, Diego se negó a modificarlo y el mural fue destruido. Después de este incidente, se le prohibió a Diego Rivera pintar en los Estados Unidos du- Uno de los murales más conocidos por su polémica y contenido fue “Man at the Cross- roads”, un mural encargado por Nelson Rocke- feller. Se presentó por primera vez como una contienda entre Pablo Picasso, Henri Matisse y Diego Rivera. Los tres negaron inicialmente la solicitud, debido a las restricciones que se pidieron para la pieza. Las directrices fueron que tenía que ser monocromático y decorati- vo. Después de algunas negociaciones Diego Rivera aceptó el proyecto, siempre y cuando pudiera utilizar el color y hacer una narración. Homenaje a los muralistas de México en Polyforum Cultural Siqueiros. (Unión Revolucionaria de Obreros Técnicos, Pintores, Escultores y Afines). Este grupo ex- presó las ideas socialistas a través del arte y muralismo, también quería incluir artesanos, talladores de madera y tejedores textiles que no fueron considerados artistas, lo cual hizo a una gran parte de la población a entender la importancia de los murales y sentirse inclui- dos en el movimiento. También imprimió in- formación sobre el grupo, que terminó siendo un periódico semanal fácilmente accesible a la mayoría del pueblo, llamado “El Machete” 2