Outlander Magazine Número 8 (mayo 2018) | Page 53

amor por la causa jacobita. Cuando lleva a su gente a re- caudar los impuestos, apro- vecha para hacer doble caja, recaudando a la vez para su causa. Y es aquí donde se vale de Jamie para sus propósitos, enseñando su maltrecha espalda para que la gente de más dinero. Aquí Jamie no tiene más re- medio que tragarse su orgu- llo. Está en las manos de Dougal. La oportunidad tan esperada para Dougal le llega de la mano de Claire. Él aprove- cha que ella está entre la es- pada y la pared en relación a Randall para matar dos pája- ros de un tiro: salvarla y anu- lar las opciones de Jamie de cara a ser el líder del clan. ¡Un buen golpe de efecto! Aquí sí que Dougal emplea su inteligencia. Se aprove- cha de que ha visto que Jamie mira de forma especial a Claire y de que es muy noble y no la dejaría despro- tegida. Con la boda de ambos quiere eliminar a su rival , ya que sabe o cree saber que Colum no va a aceptar que el líder del clan esté casado con una inglesa. Jamie sabe de todas estas intrigas pero aún así lo tiene en consideración porque son familia. Para Claire la cosa es dife- rente. Ella no le va a tener ninguna consideración. ¡No le gusta su proceder y ya! En el plano amoroso, Dougal ha intentado algo con Claire y ella lo ha rechazado. A me- dida que pasa el tiempo, va creciendo en Dougal el sen- timiento de admiración por Claire, y también su atrac- ción sexual. Eso queda patente la noche de bodas, cuando Claire baja por bebida y se encuentra con él. Dougal llega un poco más lejos y Claire vuelve a rechazarlo. Por lo visto, él se cree un buen semental, quizás porque tiene cuatro hijas y a Hamish. Además menosprecia un poco a Jamie porque él es inex- perto, así que piensa que va a dejar a Claire insatisfecha. Pero va a ser que no. Jamie se ha puesto manos a la obra, y raudo y veloz ha so- lucionado la papeleta diez sobre diez. Un baño de agua fría para Dougal. Y así va transcurriendo el tiempo, hasta que Colum se entera de la relación de Dou- gal con Geillis. Eso no le gusta nada Y lo manda para su casa. Lo peor de todo es que también manda a Jamie, dejando sola y desprotegida a Claire. Cuando Jamie consigue res- catarla y vuelven a La- llybroch, todo parece ir como debería haber sido desde un principio, pero Jamie es apresado y llevado a Went- worth. Y aquí vuelve a aparecer Dougal con su sentido práctico para aprovechar las oportunidades. Atrae a Claire hasta donde él está y le pro- pone olvidarse de Jamie y casarse con él. Pero Claire es mucha Claire, y consigue que le deje hablar con los hombres e intentar salvar a Jamie. Śi no lo consigue, se casará con él a pesar de haber descubierto que Dou- gal va detrás de Lallybroch. Después de lo de Wentworth Dougal desaparece un tiempo para volver a reapa- recer cuando se reúnen para luchar al lado de Carlos Es- tuardo. Pero Jamie ya no está bajo la tutela del clan Mackenzie. Ahora se presenta como señor de Broch Tuarach, como Fraser, su propio clan, así que ya no va a dejar que nadie se le imponga, mucho menos Dougal. Entonces Dougal tiene “la brillante idea “de buscar a Claire para que le apoye ¡gran error! Obviamente Claire no está por la labor y además le dice que es un narcisista que sólo se quiere a si mismo. Eso a él le duele y dice que quizás tenga razón pero que ante todo quiere más a la causa jaco- bita. Dougal desea tanto buscar el favor de Carlos que está dis- puesto a mandar a luchar a un puñado de hombres que no tienen ni idea de guerra, pero Jamie lo frena. Cuando por fin se encuen- tran con el príncipe, por unos momentos parece que Dou- gal ha conseguido caer en gracia a Carlos. Pero nueva- mente su carácter impulsivo después de la batalla de Prestonpans, le juega una mala pasada. Unas palabras dichas a des- tiempo, regadas con cierta agresividad, hacen que caiga en desgracia ante los ojos de Carlos Estuardo. Pero la no- bleza de Jamie le salva del olvido y destierro al que Car- los le iba a mandar. Y llega el momento culmi- nante del momento entre Colum moribundo y Dougal. En ese encuentro com- prende Dougal que todo lo que ha intentado para que Jamie no pudiera ser líder ha naufragado. Colum ha decidido que mien- tras su hijo sea pequeño, sea Jamie el que lidere el clan. Dougal no entiende por qué no puede ser él si es su her- mano. Si se ha estado pre- parando par a ello durante muchos años. Si además es el padre biológico de Ha- mish. Pero Colum ve más allá de todas esas cuestiones. Él quiere a Jamie porque sabe que si llegara el momento de escoger entre la causa jaco- bita y la protección del clan, Jamie escogería lo segundo. Lo último que conocemos de Dougal es cuando descubre lo que Claire quiere hacer con Carlos. Entonces se ofusca totalmente y se en- frasca en una lucha a muerte con su sobrino. Ese es el final de una vida llena de al- tibajos y plagada de luchas internas en su mente. Dougal MacKenzie, tras esa fachada de hombre orgu- lloso, de guía de sus hom- bres, de seguridad en sí mismo, esconde un alma atormentada. Sus ansias de poder estaban por encima de todo. Para él el poder era más importante que las per- sonas y que sus sentimien- tos hacia ellas. Siempre anheló ese poder, y ese deseo le cegó el enten- dimiento. Un verdadero líder es aquel que sabe delegar. Aquél que sabe escuchar. El que tiene en cuenta las opi- niones y se preocupa por el bienestar de su grupo. El rencor hacia su hermano, dio forma a su carácter. Dou- gal se dejó cegar por la am- bición de que su figura se viera relacionada con Carlos Estuardo y así tener un lugar destacado en su reino puesto que no dudó ni por un instante en que los jacobitas volverían a tener el poder y supedito todo lo demás a eso. Y cuando se dio cuenta de que su propio sobrino iba a “traicionar” esa causa, le quiso poner fin. Ni siquiera formó parte de la última ba- talla. Triste fin para un hom- bre que lo sacrificó todo por una causa perdida. OUTLANDER MAGAZINE 53