OTWO Magazine November 2019 | Page 52

nas entre escolares, personal docente, empresas y organizaciones medioambientales en diversos rin- cones del Reino Unido, formaron parte de los más de dos centenares de eventos que recorrieron todo el país. Cien mil personas en Londres de la mano de em- presas como Lush Cosmetics y la empresa de ropa para actividades al aire libre, Patagonia, cerraron sus tiendas y oficinas para solidarizarse con la huel- ga. El equipo de OTWO se unió en Gibraltar a los doscientos cincuenta padres, estudiantes, niños y miembros de grupos que luchan por el medio am- biente, durante la marcha que recorrió Main Street y que concluyó en el número 6 de la calle Convento. En las dependencias gubernamentales, se entregó una petición firmada al Dr. John Cortés, Ministro de Medio Ambiente, en la que se exige la creación que exigía la implementación de un organismo climático independiente con una agenda multipartidista. Marcha y manifiesto estuvieron organizadas por el grupo local Coalition for Climate Action, apoyan- do a Parents for Future Worldwide. Esta coalición está conformada por organizaciones ambientales locales, entre las que se encuentran el Proyecto Nautilus, el Grupo de Seguridad Ambiental y Gibral- tar Sostenible. Al describir el propósito de un or- ganismo climático independiente, Janet Howitt, de ESG, explicó, “sentimos que la política a menudo se interpone en el camino de cualquier partido que implemente un plan [climático] a largo plazo... que- remos despolitizar el medio ambiente y poder pla- near con cinco, diez, quince años de anticipación, ya que el cambio climático y la emergencia que rodea a todos estos temas, lo exigen “. En España fueron masivas las marchas de los días 20 y 27 de septiembre, con medio millón de participantes en ciudades como Madrid, Barcelona, ​​ Granada, Zaragoza y Valladolid. Endesa, una de las empresas de suministro eléctrico de mayor cala- do en el territorio nacional, anunció que dejará de operar en las centrales térmicas de carbón penin- sulares, incluyendo las del litoral almeriense, As Pontes y La Coruña. Los andaluces salieron a la calle en Málaga, Cádiz, Estepona, Sevilla y Jerez de la Frontera. A nivel internacional, los organizadores esta- 50 dounidenses, han confirmado que en EEUU fueron más de mil manifestaciones en los cincuenta esta- dos miembros. Siendo la de la ciudad de New York una de las más numerosas con 250.000 personas. Las autoridades de las escuelas públicas de Nue- va York, Boston y Chicago fueron permisivos con las faltas lectivas para participar en las distintas manifestaciones y muchas empresas cerraron sus puertas para unirse a las protestas. La joven activista Greta Thunberg, participó en las manifestaciones de Nueva York, dirigiendo a la multitud con gritos y vítores entusiastas. “Esto es una emergencia. Nuestra casa está en llamas”, de- claró. “Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para evitar que esta crisis empeore”. Días después de las primeras protestas, la ciu- dad de New York acogió la Cumbre de Acción Cli- mática de las Naciones Unidas, en la que sesenta grandes estados anunciaron estar trabajando o ex- plorando planes para reducir el efecto invernadero a casi cero. Aunque, muchos críticos temen que estos compromisos no sean lo suficientemente drásticos para garantizar que la temperatura global no supere un punto de inflexión irreversible. La adalid de este cambio medioambiental exigi- do a nivel mundial, Greta, se dirigió a las Naciones Unidas con un discurso poderoso y apasionado, se- ñalando la falta de compromiso y acción definitiva de los estados miembros, declarando sin rodeos, “nos están fallando. Los jóvenes están empezando a comprender vuestra traición. Las miradas de las nuevas generaciones están sobre ustedes y si deci- den fallarnos, nunca lo perdonaremos”. Este año ha sido testigo de la conciencia existen- te y de las frustraciones reinantes en los gobiernos de todo el mundo, debido a graves desastres climá- ticos que han sido noticia en todo el mundo. Décadas de preocupación por el cambio climá- tico, han culminado en estas últimas fechas en un movimiento liderado por jóvenes que ponen por bandera la necesidad de tomar medidas rápidas de forma drástica, dejando patente que son millo- nes de personas en todo el mundo solicitando que quieren un cambio de estrategia real. Tal y como Greta expresó a la multitud que grita- ba en Nueva York: “haremos que nos escuchen. El cambio está en camino. Les guste o no.” OTWO 04 / NOVEMBER 2019 OTWO 04 / NOVEMBER 2019 51