Jueves 9, noviembre
Buenos días. Como toda esta semana leemos lo que Jesús nos dice en el
evangelio.
También les dijo Jesús: “El Reino de Dios es como un hombre que echa
una semilla en la tierra. Lo mismo si está dormido como si está despierto,
si es de noche como si es de día, la semilla, sin que él sepa cómo, germina
y crece. La tierra por sí misma da el fruto: primero la hierba, luego la
espiga, después el grano gordo en la espiga. Y cuando el fruto está
maduro, el hombre echa la hoz porque es el tiempo de la cosecha.”
Reflexión: Cada día que amanece es una oportunidad que Dios te da para
empezar de nuevo. La vida, tu vida, es como esa semilla que va creciendo sin
que apenas lo percibas. Aprovecha este día como si fuera el único que vas a
vivir: mira la vida con ojos nuevos, ve el lado bueno de las cosas, disfruta de la
amistad, de la compañía de aquellos a quienes amas y sé feliz. Al final del día,
pon todo en manos de Dios con la confianza que da el saber que te ama
inmensamente, así como eres.
¿Aprovechas y disfrutas cada día o simplemente dejas que vayan pasando
los días? El compromiso para hoy será descubrir algo, algún momento, alguna
persona que te ha hecho feliz, especial el día, algo que haya merecido la
pena.