Jueves 28, septiembre
Buenos días. Seguimos con el lema del curso: "Dale la vuelta com+pasión". Pero
para dar la vuelta a las situaciones injustas y de sufrimiento de nuestra
sociedad primero tenemos que aprender a mirar y a escuchar. Leemos
despacio esta reflexión:
Quienes viven donde millones de personas se encuentran sometidas a
condiciones infrahumanas, viéndose prácticamente reducidas a la
esclavitud, deberían estar muy sordos para no escuchar el clamor de los
oprimidos. Y el clamor de los oprimidos es la voz de Dios.
Todo aquel que resida en los países ricos, donde desde siempre y
todavía hoy sigue habiendo aquí y allá zonas grises de subdesarrollo y
de miseria, le bastará con que sepa escuchar un poco para ensordecerse
con el clamor de los sin voz y sin esperanza. Y el clamor de los sin voz y
sin esperanza es la voz de Dios.
Quien haya caído por fin en la cuenta de las muchísimas injusticias,
consecuencia de tan desigual reparto de las riquezas, deberá tener un
corazón de piedra para no captar la protesta de los pobres. Y la
protesta de los pobres es la voz de Dios. (Helder Cámara)
¿Te has preocupado alguna vez por mirar las situaciones de injustica de
nuestro mundo, de tu barrio, de las zonas de tu ciudad? ¿Te has preocupado
alguna vez por escuchar el clamor de los “sin voz”? ¿Quiénes son los” sin
voz”para ti?