Viernes 6, octubre
Buenos días. Hoy terminamos la semana con una leyenda árabe preciosa. Dice
la leyenda árabe que dos amigos viajaban por el desierto cuando en un
determinado punto del viaje discutieron, y uno le dio una bofetada al otro.
El otro, ofendido, sin nada que decir, escribió en la arena: HOY, MI MEJOR
AMIGO ME PEGÓ UNA BOFETADA EN EL ROSTRO.
Siguieron adelante y llegaron a un oasis donde resolvieron bañarse. El que
había sido abofeteado y lastimado comenzó a ahogarse, y su mejor amigo
no dudo en salvarlo.
Al recuperarse tomó un estilete y escribió en una piedra: HOY, MI MEJOR
AMIGO ME SALVó LA VIDA.
Intrigado, el amigo preguntó: ¿Por qué cuando te lastimé, escribiste en la
arena y hoy escribes en una piedra?
Sonriendo, el otro amigo respondió: Cuando un gran amigo nos ofende,
debemos escribir en la arena donde el viento del olvido y el perdón se
encargarán de borrarlo y apagarlo, pero cuando nos pase algo grandioso,
debemos grabarlo en la piedra de la memoria del corazón donde jamás
viento alguno pueda borrarlo.
¿Qué beneficios: gestos, apoyo, amor, palabras… tenemos grabadas en el
corazón de nuestros amigos o de personas que nos quieren?
Damos gracias al Señor por todas las personas que nos aman.