Sé -y ese conocimiento es irrefutable porque, más allá de la razón, proviene de la pulsión elemental de la que la misma razón se sirve para edificar sus fantasías lógicas- Sé, repito, qur laq necesidad universal se explaya y se realiza, sin que caigamos en cuenta, a través de la libertad de nuestros actos y de la incetidumbre que tal libertad hace germinar en cada uno de nosotros al enfrentarnos a múltiples posibilidades y, con ello, a la posibilidad del error my la desdicha(...) La presencia cósmica - aunque nos cueste aceptarlo- es vida en cualquiera de sus manifestaciones y niveles, desde la partícula subatómica hasta la inexplorada complejidad neuronal del cerebro humano.