La Visitación - James B. Janknegt
Día Tercero
(Nacimiento de Juan, el Bautista)
Después de la visión que Zacarías tuvo en el templo de Jerusalén, pasaron varios meses. Y llegó el día en
que Isabel, su esposa, dio a luz un niño. Los familiares y vecinos daban gracias a Dios y la felicitaban.
Cuando fueron a ponerle nombre al recién nacido, todos querían llamarlo Zacarías igual que el papá,
como se usaba entonces. La madre sin embargo, dijo: No. Quiero que se llame Juan. Le preguntaron por
señas al padre. Y éste escribió en una tablilla: "Juan es su nombre". Y todos quedaron admirados.
Entonces se le soltó la lengua a Zacarías y comenzó a dar gracias a Dios, diciendo: "Bendito sea el Señor,
Dios de Israel porque ha visitado y redimido a su pueblo, presentando entre nosotros al Salvador (es
decir, a Jesús que iba a nacer). Así se han realizado las promesas que Dios nos hizo por medio de los
profetas. Para salvarnos de todos los enemigos".
Y la gente decía: ¿Qué irá a ser este niño cuando sea grande? Porque la mano de Dios estaba con él.
Juan iba creciendo, e iba aprendiendo muchas cosas. Y después se fue para el desierto, a prepararse para
ser profeta.Allí se vestía con un manto de pelo de camello y se alimentaba con langostas y miel silvestre.
Y a quienes lo visitaban les decía: "Conviértanse, porque muy pronto va a llegar el Salvador".
Diciembre 18
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