La etiología es múltiple, pudiendo deberse a enfermedades sistémicas y
endocrinas, neoplasias, formaciones quísticas, o a la presión que ejercen el
labio, la lengua o la mejilla durante el desarrollo.
Es importante realizar una buena exploración oral, ya que esta desviación
predispone a la enfermedad periodontal. Además, si se produce el contacto
con el tercer incisivo, el canino mandibular se desplazará labialmente
pudiendo ocasionar ulceras labiales.
Algunos tratamientos son:
Ortodoncia: Se trata de una terapia larga que puede resultar difícil. Se
utilizan botones ortodónticos y gomas elásticas.
Figura 8. Ortodoncia. http://cort.as/-Hh7S
Exodoncia: La extracción del incisivo lateral puede ser suficiente para evitar
el apiñamiento y el acumulo de placa secundario; sin embargo, se
recomienda la exodoncia del canino maxilar en otros casos.
Linguoversión de los caninos mandibulares: Al igual que en el caso anterior
se trata de una maloclusión de clase 1 existiendo una mayor predisposición
en determinadas razas dolicocéfalas y en el Caniche. En este caso los
caninos mandibulares se desplazan lingualmente. Se debe a causas
diversas como traumatismos, quistes, neoplasias, persistencia de la
dentadura decidua y mal posicionamiento del primer molar o tercer incisivo
mandibular, que pueden interferir con el patrón normal de erupción.
Existen numerosas opciones de tratamiento que se pueden dividir en dos,
movimiento ortodóntico del diente o eliminación de la fuente del trauma.
Otro método más barato, pero no por ello menos efectivo y que se ha
realizado con éxito eligiendo bien los casos, es la terapia de la pelota de
goma. Se trata del juego diario, mínimo tres veces al día, con una pelota de
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