de comprimidos o líquido, como por
ejemplo Plac·Control, que revela en
rojo las zonas donde hay biofilm.
Limpieza interproximal
Los espacios entre los dientes (área
interproximal) son zonas de difícil ac-
ceso. Para garantizar la eliminación
del biofilm oral en estos espacios,
aparte del uso del cepillo dental, es
conveniente utilizar otros elementos
de higiene bucal como cintas/sedas
dentales, cepillos interproximales o
irrigador bucal.
MÉTODOS QUÍMICOS
Dentífrico y enjuagues bucales
con aporte de flúor
La prevención de la caries viene de-
terminada por el uso de flúor. El flúor
es un mineral que contribuye a au-
mentar la dureza de los dientes, se
incorpora al esmalte dental y trans-
forma la hidroxiapatita del esmalte en
fluorapatita más resistente a la acción
de los ácidos. También tiene acción
remineralizante sobre primeras lesio-
nes cariosas que hayan aparecido so-
bre el esmalte, puesto que reacciona
con el calcio y forma fosfato cálcico
con efecto protector.
La pasta dentífrica es el producto de
autoaplicación de flúor más generali-
zado. Las pastas dentales contienen
diversos tipos de ingredientes con
efectos terapéuticos y la sustancia más
habitual es el flúor.
Como complemento al cepillado mecá-
nico, el uso de una pasta de dientes con
flúor previene la aparición de caries. El
aporte adecuado de flúor en una pasta
dental son 1.450 ppm a partir de los 6
años de edad. En menores de esta edad,
el aporte es menor debido a la posibi-
lidad de ingesta de la pasta dentífrica.
Respecto a las personas con policaries
o con un riesgo de caries muy elevado,
el aporte de flúor puede verse aumen-
tado, pautándose en estos casos con-
centraciones de flúor sobre 2.500 ppm
como puede ser Fluor·Aid.
También es recomendable el uso de un
colutorio como coadyuvante a la higie-
ne bucal mecánica, ya que se considera
un medio muy efectivo que refuerza la
acción realizada con el cepillo dental y
la pasta dentífrica, puesto que llega a
lugares de difícil acceso, aumentando
la eliminación del biofilm oral acumu-
lado en lengua, encías, etc., además de
permitir mantener los principios activos
más tiempo en la boca.
En el mercado existen diversos tipos de
formulaciones en colutorio que contie-
nen fluoruro sódico para un uso diario
(concentración de flúor al 0,05%-225
ppm de ión flúor) y semanal (concen-
tración 0,2%-900ppm de ión flúor).
Se pueden utilizar en niños a partir de
6 años, siempre que se asegure que el
niño es capaz de enjuagarse sin tragar-
se el colutorio.
En conclusión, el uso conjunto del
cepillado con pasta dentífrica, la
limpieza interproximal y un colutorio
fluorado eficaz, garantiza el éxito en
el control y prevención de la caries.
7