Número 17 - Año 2 - Marzo 2014 Número 17 - Año 2 - Marzo 2014 | Page 24
Como vivir en familia la Semana Santa
La principal herencia que los padres pueden dejar a sus hijos es
una adecuada educación, y si es una educación centrada en los
designios de Dios mucho mejor. Hoy en la actualidad los padres
se preocupan más de las cosas materiales, llevarlo a la mejor
escuela, ponerlos a practicar deportes, clases de idiomas etc.
olvidándose de lo más importante construir vínculos afectivos
en la relación padres e hijos. Es importante que los padres de
familia analicen los vínculos que hacen con sus hijos, todos los
problemas que aparecen en el desarrollo de nuestro hijos tiene
una relación directa con el vínculo. El vínculo es la conexión
que desde siempre se establece con ellos, recíprocamente.
Esta conexión se instala lentamente desde el nacimiento y aun
antes, desde que está en el vientre materno.
La madre recibe y envía mensajes nerviosos y hormonales, que
no son otra cosa que la manifestación orgánica de su alegría por
el embarazo. De la misma manera, poco a poco se va integrando
el padre, grabando mensajes de ternura, protección, límite y
seguridad.
Gradualmente, se crea una relación única e irrepetible. Es como
colocar cables o cordeles en el interior de ellos y en el nuestro.
Cordeles suaves, delicados pero sin embargo, en su conjunto,
imprescindible para forjar la persona en el otro extremo, que es
nuestro hijo.
Debemos tener presente cada vez que no podemos entendernos
con nuestros hijos. Fortificamos o debilitamos el vínculo con
nuestras acciones; pasamos información que en ellos es
energía
(positiva
o
negativa);
tenemos
actitudes,
desplazamientos pequeños, que ellos ven grandes y que les
forman su esqueleto mental.