nº 1 -Boletín Oficial FEDDF 15 - BOLETÍN FEDDF Mayo 2019 | Page 36
LO DICE LA CIENCIA:
EL DEPORTE NOS HACE MÁS FELICES
Para las personas sedentarias,
lanzarse a la piscina al amane-
cer, correr cada día unos kiló-
metros, no fallar en las clases
del gimnasio o cruzar la línea
de meta de un triatlón son ruti-
nas incomprensibles por la dis-
ciplina, la fuerza de voluntad y
el esfuerzo físico que requieren.
Para las personas activas, esta
forma de vida no solo reporta
enormes beneficios en todos
los planos de la vida, sino que,
además, en ocasiones, genera
una verdadera explosión emo-
cional, un júbilo que, aunque
efímero, engancha como una
poderosa droga, y que ha sido
descrito como la «euforia del
corredor» naturales del cuerpo.
El placer que genera la reali-
zación de ejercicio aeróbico
durante un tiempo prolongado
se estudia desde hace décadas,
pero aún hoy no existe una cer-
teza absoluta sobre cuáles son
las causas, cómo puede llegar
a controlarse, o las razones por
las que algunas personas pue-
den sentirla y otras nunca lo
harán, aunque sean deportistas
habituales.
Carmen Gavira
Las investigaciones sobre endorfinas, y deporte chocaron duran-
te décadas con la imposibilidad de saber con exactitud la varia-
ción de los niveles de endorfinas hacia el cerebro antes y des-
pués del ejercicio
Diversos estudios científicos
han demostrado que la reali-
zación de actividad física des-
encadena una respuesta hor-
monal que permite regular la
temperatura corporal, fortale-
cer los músculos o cambiar
el estado de ánimo, pues las
hormonas son antidepresivos
naturales del cuerpo.
Las investigaciones sobre en-
dorfinas y deporte chocaron
durante décadas con la impo-
sibilidad de saber con exacti-
tud la variación de los niveles
de endorfinas hacia el cerebro
antes y después del ejercicio.
Por eso, solo fueron hipótesis
bien fundadas hasta que en
2008, cuando el investigador
de la Universidad de Bonn
(Alemania) Henning Boecker
confirmó que la creencia po-
pular podía estar avalada por
la ciencia.
Sin embargo, desde este estu-
dio, han surgido voces discre-
pantes con atribuir a las endor-
finas toda la responsabilidad
en la generación del conocido
como ‘júbilo del corredor’, al
entender que las endorfinas
son demasiado grandes como
para superar las barreras natu-
rales que protegen el cerebro.
Una investigación de 2015
relaciona la anandamida,
con un endocanabinoide pa-
recido al canabis que genera
el cuerpo de forma natural,
con el placer que sentimos al
hacer deporte
En 2015, se abrió una nueva
línea de investigación se cuan-
do el científico alemán Johan-
nes Fuss publica un estudio
en el que señala como respon-
sable del subidón de correr a
otro neurotransmisor: la anan-
damida, un endocanabinoide
o canabinoide endógeno pare-
cido a la marihuana que segre-
ga el cuerpo de forma natural,
y que también podría explicar
la dosis de placer que experi-
mentamos al hacer deporte.
Deporte y cannabis
Fuss llevó a cabo un experimento
con ratones con la intención de
estudiar los efectos derivados de
la euforia del corredor, la reduc-
ción de la ansiedad y la desapa-
rición del dolor. Para ello, dividió a
los animales en tres grupos: rato-
nes activos, ratones sedentarios y
ratones transgénicos inmunes a
los efectos de los endocanabinoi-
des. Aquellos que habían corrido
en la noria durante horas, tenien-
do mayores niveles de ananda-
mida, sufrían menor ansiedad y
toleraban mejor el dolor. Por el
contrario, los ratones sedentarios
y los transgénicos mantenían sus
niveles de estrés y dolor.
Endorfinas: ¿qué son?
Tradicionalmente, estos cambios en el estado de ánimo bajo
actividad física se han relacionado con la generación de en-
dorfinas. Estos neurotransmisores, producidos por el sistema
nervioso central, son producidos por nuestro cuerpo de for-
ma natural y producen efectos similares al opio, favoreciendo
la sensación de placer y disminuyendo la fatiga. Por eso, se
denominan «hormonas opiáceas», o hormonas de la felici-
dad.
Las investigaciones sobre endorfinas y deporte chocaron du-
rante décadas con la imposibilidad de saber con exactitud la
variación de los niveles de endorfinas hacia el cerebro antes
y después del ejercicio. Por eso, solo fueron hipótesis bien
fundadas hasta que en 2008, cuando el investigador de la
Universidad de Bonn (Alemania) Henning Boecker confirmó
que la creencia popular podía estar avalada por la ciencia.
37 FEDDF.ES