nº 1 -Boletín Oficial FEDDF 14 - BOLETÍN FEDDF Enero 2019 | Page 12

ACCESIBILIDAD Estoy seguro de que ya es- taréis pensan- do en cuántas barreras, deri- vadas de la in- teracción con el automóvil, podéis estar salvando día a día. Es muy habitual que las entradas al aparcamiento subterráneo intersecten de forma inade- cuada con la acera, crean- do pendientes transversales insalvables HUMANIZACIÓN DEL ESPACIO PÚBLICO Peatonalizar mi municipio. Y no es que haya olvidado mis orígenes en defensa de la accesibilidad Antonio Corbalán Pinar. Arquitecto Estoy trabajando para peatonalizar mi muni- cipio. Y no es que haya olvidado mis orígenes en defensa de la accesibilidad, ni tampoco se trata de postureo. Se trata precisamente de humanizar el espacio público, para que la invasión del coche no produzca ni con- solide nuevas y viejas barreras urbanísticas y arquitectónicas a las personas, con o sin 12 FEDDF.ES diversidad funcional. Y es que minimizar el impacto del automóvil en una ciudad, es promocionar y cuidar la accesibilidad urba- na. Aunque caben algunos matices. Estoy seguro de que ya estaréis pensando en cuántas barreras, derivadas de la interac- ción con el automóvil, podéis estar salvando Lo que se experimenta al caminar, o ir en silla de ruedas, por ejemplo, no es tenido en cuenta, porque si así fuera, la humanización del espacio público implicaría actuaciones plenamente accesibles En realidad, en el planeamiento urbanístico se invierte más tiempo en dilucidar cómo van a circular los coches que las personas día a día. Es muy habitual que las entradas al aparcamiento subte- rráneo intersecten de forma inade- cuada con la acera, creando pen- dientes transversales insalvables, o también creando pasos peatonales sin vados, en calles donde prima la comodidad del vehículo antes que la del peatón, que normalmente son incompatibles entre sí. Ni si- quiera los últimos diseños de calles de plataforma única han soluciona- do la convivencia entre el peatón y el vehículo, al simplificar la solución sin tener en cuenta, entre otras co- sas, la accesibilidad considerando la diversidad funcional sensorial. En realidad, en el planeamiento urba- nístico se invierte más tiempo en dilu- cidar cómo van a circular los coches que las personas, presuponiendo que, tras la urbanización de los terre- nos que ahora son un erial, se va a mejorar la circulación de las personas por disponer aceras y zonas verdes. Se ubican y diseñan con más criterio, aparcamientos, señalización, radios de giro en calles, limitaciones de ve- locidad e incorporaciones a calles existentes. De hecho, ante la entrada de un aparcamiento subterráneo, la construcción prima que no roce el coche en los bajos antes de que se circule cómodamente sobre la acera, a pesar de que existe normativa muy clara respecto a cómo solventar la in- tersección de manera accesible y que permita un paso seguro de ambos actores. Si hablamos de actuaciones en la ciudad existente, normalmente y salvo casos muy puntuales, lo que se prioriza son otros aspectos del urbanismo, la edificación o el medio ambiente. Pero el coche sigue ganan- do, sigue dejando. En mi opinión, lo 13 FEDDF.ES