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ESQUIANDO EN SAN ISIDRO

El pasado día 30 de enero los niños y niñas de quinto y sexto fuimos a la estación de esquí de San Isidro durante una semana; nos acompañaron dos profesores, José María y Pili. Para muchos de nosotros era la primera vez que salimos tan lejos sin nuestros padres y estábamos muy ilusionados y también un poco nerviosos.

Coincidimos en el albergue con algunos compañeros de 1º y 2º de la ESO del instituto, con los que realizábamos algunas de las actividades de tiempo libre. Entre nosotros compartíamos habitaciones cuatro, seis y hasta ocho personas y la comida era en el comedor todos juntos.

Para cuidarnos en el albergue teníamos tres monitores; había una chica que se llamaba Rebeca, un chico que se llamaba Miguel y otro que se llamaba José; eran muy buenos con nosotros.

Nos levantábamos a las ocho de la mañana, desayunábamos y luego íbamos a esquiar. Después de las clases de esquí, comíamos y luego tiempo libre para jugar y hablar. Allí hicimos como un whatsap de notas. Había sobres que se ponían en las puertas de los cuartos y metíamos notitas para cada persona.

En la nieve también teníamos monitores de esquí; cada diez personas aproximadamente teníamos uno. Algunos de los que fuimos ya sabían esquiar, pero la mayoría no; aún así, aunque al principio nos caíamos muchas veces, todos aprendimos bastante rápido.

Desafortunadamente no todos los días pudimos esquiar porque había mucha ventisca y cerraban la estación, pero incluso esos días también nos divertimos mucho jugando con la nieve, haciendo muñecos, tirándonos en trineo y caminando con raquetas.

El jueves, uno de los dos días que no pudimos esquiar, fuimos a visitar el Museo de la Fauna Salvaje en el que se encuentran animales disecados de todos los continentes. Luego por la noche hicimos una fiesta con baile y esas cosas y después de la fiesta nos fuimos todos a la cama.

Nos lo pasamos muy bien y cuando llegó el viernes, aunque teníamos ganas de volver para ver a nuestros padres, por otro lado nos daba mucha pena porque queríamos seguir esquiando. Todos repetiríamos la experiencia.

Alumnado de 5º y 6º de Blanco de Cela.