Conclusiones:
En base a los datos consultados, se observa que es verdadero que los jóvenes no pueden
salir de la marginalidad debido a que Argentina, de manera estructural, no pudo superar
sus crisis políticas y económicas, aspectos que le impidieron globalizarse de manera
efectiva. Ante esto, distintos sectores proponen simplemente bajar la edad de
imputabilidad y privar de su libertad a los individuos, olvidando o ignorando
completamente cómo solucionar el problema de raíz.
Se concluye que es necesaria cierta actividad estatal para proteger a los jóvenes en vez
de castigarlos, es decir, que existan órganos estatales que puedan brindarle los derechos
básicos a un considerable grupo que históricamente se ha visto desfavorecido por un
sistema económico en crisis, corrupción política, una brecha clasista y el ejercicio de la
violencia cultural.
BIBLIOGRAFÍA:
ARAKAKI, Agustín (2011). La pobreza en Argentina 1974-2006. Construcción y
análisis de la información, Centro de Estudios sobre Población, Empleo y Desarrollo.
LARDIÉS N., IOVANNA CAISÓN S. & CARABETTA S. (2014). Trabajo y
Ciudadanía, Editorial Mauipe.