Este año ha sido lleno de
muchas alegrías, tristezas al
inicio de clases de quienes
estudiaban y se despegaban de sus padres e hijos
por primera vez, experiencias hermosas, llenas de ternura, inocencia y mucho aprendizaje.
Un año en el que se ha fomentado en cada actividad realizada diariamente los
valores, el respeto hacia los demás y sobre
todo el amor hacia sí mismos.
Ha sido un año lleno de arte , de imaginación en el que ha resaltado la creatividad,
el trabajo en equipo y la dedicación de
los padres y docentes para que nuestros
niños sean quienes cambien este mundo
de tristezas con sus grandes sonrisas y calurosos abrazos, con sus historias llenas de
fantasía, de ilusiones, de sueños, picardía y