26
Jesús Martínez
La aluminosis social para explicar los males que nos afec-
tan y nos corroen. De los desahucios a los robos. Pasando por
los análisis críticos del discurso (Ruth Wodak, Norman Fair-
clough, Teun van Dijk). El libro comienza con la exposición
de la patología de la aluminosis, con alguno de los numerosos
casos de edificios de cemento podrido que penden de un hilo
en Barcelona ciudad. Posteriormente, entran en juego dife-
rentes crónicas con sus «provisiones poéticas», lo que el poeta
revolucionario ruso Maiakovski (La rebelión de los objetos) en-
tendía por material sobrante, susceptible de ser reutilizado en
alguna ocasión. En este caso, ve la luz el contenido no publica-
do, arrinconado, residual de los diferentes reportajes elabora-
dos para la prensa escrita: lo que aquí se llaman «restos».
Los restos también pueden ser los flashes de Reportero Jesús,
aquello que se quedó en el trasfondo de los recuerdos, el sub-
texto de la memoria. A partir de la página 186 se puede leer El
Gran Libro de Barcelona (365 postales en color de la ciudad), que
nunca se publicó y que guarda retazos con el Libro Gordo de
Petete, muñeco tan sabio como el muñeco MIM (Mi Inteligen-
te Muñeco), el espíritu de la ciencia del programa Los sabios,
de TVE (1984-1986), y que era un precursor de los guerreros
de anime (le dio vida el estudio Nippon Animation, padre de
muchos mangas).
Y en las 24 entradas con el epígrafe «Glovo» hace su apa-
rición la decena de glovers (Luffy, Seshomaru, Zoro, Seiya,
Kakashi, Naruto, Yamcha, Sasuke, Ranma y Shaoran), corre-
dores de fondo, gregarios, repartidores de la mensajería Glovo,
startup que factura unos cien millones de euros. Glovo cuen-
ta con unos cuarenta mil trabajadores autónomos por todo el
mundo, o falsos autónomos según Inspección de Trabajo y
Seguridad Social. El éxito de Glovo, que ya actúa como multi-
nacional –está presente en más de veinte países–, se debe a que