Multimodal Febrero Marzo 2014.pdf Febrero Marzo 2014 | Page 33
Comercio Exterior | 33
dad 8 a 1 podemos enumerar los siguientes tipos de cambio:
- 1 Dólar = 8 pesos para exportadores,
importadores y personas físicas autorizadas a comprar y dispuestas a atesorar en
bancos durante un año
- 1 Dólar = 9,60 pesos para autorizados a comprar que no atesoren en bancos por un año
- 1 Dólar = 10,80 pesos para aquellos que
gasten en el exterior con tarjeta de crédito o realicen compras al exterior o paquetes turísticos
- 1 Dólar = 11,25 para el contado con liqui
Una interesante encrucijada, si analizamos algo que lo he repetido anteriormente. ¿Quiénes operan al tipo de cambio oficial? Importadores, exportadores y
ahora los ahorristas autorizados dispuestos a dejarlos durante un año en cajas de
ahorro en dólares.
Las primeras repercusiones fueron que
esta medida beneficiaria a los exportadores
ya que recuperarían rentabilidad y competitividad que habían ido perdiendo conforme
pasaban los años, por culpa de la inflación.
Los principales apuntados como favorecidos fueron los exportadores de granos,
se espera ansiosamente la famosa liquidación de divisas de ellos que vendría a fortalecer las reservas del Central, cada vez más
escasas. En estos días se habla de U$S 28 mil
millones, desde la liberación del cepo ya se
han gastado 2 mil millones en ventas y en
mantener el tipo de cambio equilibrado.
Los granos y en especial la soja no
son perecederos por lo que los productores / exportadores pueden esperar que
aparezcan mejores oportunidades sin que
su producto corra riesgo de perecer. Si
tenemos en cuenta que la soja tributa un
35% de retenciones, este nuevo escenario le daría un dólar a $5,20. Con una
inflación que parece no detenerse, no se
observa como un momento ideal para
que los grandes exportadores de granos
liquiden sus divisas pudiendo esperar
hasta que un nuevo panorama más claro
aparezca en su horizonte.
Entonces ¿si las medidas fueron devaluar e intentar frenar la devaluación, se
deberían recuperar las exportaciones,
aumentar el ingreso de divisa por ende las
reservas y se equilibra la balanza comercial? La respuesta es que difícilmente pase
y menos aún en grandes cantidades.
Como analizamos, los grandes exportadores enfrentan retenciones altísimas y no
están dispuestos a exportar en estas condiciones. La inflación no se detiene o peor
todavía, al tener un panorama tan poco
claro, las especulaciones en los aumentos de
precios no cesan. Lo más complicado aún es
que no se han definido los salarios que
deberán pagar los empresarios durante el
2014. Ninguno de los gremios habla de
menos de un 30% de aumentos.
Entonces la devaluación viene acompañada de aumentos en los insumos,
aumentos de precios por incertidumbre,
más los reclamos salariales. Si le sumamos
que la agroindustria mendocina enfrenta
un año con mermas enormes en la producción por las contingencias climáticas.
¿Este es el escenario favorable para
los exportadores? Mejor ni nos imaginamos lo que sería uno desfavorable. La
inflación corre detrás de cada una de las
industrias y medidas tomadas en un fin
de semana más el control de precios no la
sujetará. Esto impacta en la línea de flotación de todas y con mayor vehemencia en
las economías regionales.
Llevo mucho tiempo afirmando que la
inflación debe pasar a ser un tema de agenda. Hoy a un año y medio de las elecciones
están intentando combatirla con medidas
que parecen ser aspirinas que pierden el
efecto muy rápido. Además de subir tasas
de interés y "cuidar precios" con inspecciones a comercios, la economía y sus actores
necesitan reglas claras, previsibilidad y confianza para operar con tranquilidad.