Morelos violeta No.2 Mayo - Junio | Page 14

Imagen: Resistencia Lúcida Hacia una perspectiva crítica, que visibilice a los varones en la participación social Por José Juan Sanvicente Cisneros. El miedo ó enojo, más frecuente es suponer que con cuestionar al machismo será dejar de ser sí mismos, que destruirá a la sociedad, siendo una suposición equivoca, no se destruye, sólo la inexorable transformación de todo grupo social. JJSC L os estudios de género aparecen como una propuesta legitimadora de un campo de teórico y político, no sólo de una acción de un grupo de mujeres, sino de una acción social que pone a la luz del discurso oficial, un impase de las incongruencias que se legitiman desde la hegemonía. No podía verse, hasta en tanto el discurso no se plantea esos horizontes críticos y autocríticos que permiten distanciarse de la ideología. Difícilmente un discurso ofrece su “botón rojo” de autodestrucción, tiene que venir de afuera con un paradigma que lo critique, reformulando un nuevo saber, lo mismo ocurre con el análisis de la situación entre mujeres y varones, ofrecido desde el enfoque de género, como lucha de poder, típicamente subrayando, las desigualdades que ejerce el machismo, violencia, patriarcado entre otros elementos, en las relaciones humanas, matizando las relaciones entre varones y mujeres. Las desigualdades de género evidencian un “sistema de privilegios masculinos” que dispone de elementos diversos que subsumen a grupos no favorecidos (principalmente mujeres) en excluirlos de esos beneficios y peor aún, llevar ese ejercicio al terreno de la normalización o naturalización (que para siguientes análisis habrá que desnaturalizar lo 13 normal), oscurecidas las relaciones humanas por las “naturalizaciones” que son traducidas en formas de discriminaciones diversas, justificadas a manera de tradiciones, leyes, cultura, o como se quiera revisar, sólo se convierten en prácticas de auto legitimación de sus discursos para continuar engendrando ese ciclo. Entonces, estos discursos paradigmáticos no pondrán en su existir el virus que le destruya, sino todo un sistema de defensas que le permitan mutar para continuar preservando su condición más básica; existir. Por ello que al venir discursos que le deslegitiman, estos hacen lo necesario para repelerlo, a la luz del género así sucede, la imposición machista dispone de argumentos varios para intentar conservarse, un desafío que provoca contrapesos es el feminismo y su herramienta, los estudios de género, generado en tiempo reciente, al momento de escribir este texto, que los grupos conservadores la han llamado, ideología de género (poniéndola en el contexto de la deslegitimación o cómo un discursillo de gente disidente y disparatada).