Pompeya
Autor: Regina Montserrat Romero Fernández
Matrícula: A01704283
Nombre: El Mito de Dirce
Personajes:
rey Niceto
Antíope
Zeus
rey Lico
Dirce
Dionisio
Zeto
Anfrión
De qué trata: Se dice que alguna ves en Tebas vivió un chica llamada Antíope, hija del rey
Niceto, cuya belleza era admirada por mucho, tal era que logró captar la atención de Zeus, quien
la conquistó y la dejo embarazada. Cuando le mencionó a su padre lo ocurrido él no le creyó, al
contrario, la acuso de pecadora y mentirosa, de este modo su padre la desterró de su reino,
tiempo después el rey Niceto se suicido por la vergüenza y deshora que sintió por la situación de
su hija, de este modo su hermano Lico tomo el trono. Tiempo después de dar a luz busco
consuelo con su tío Lico y su esposa Dirce quien se dice que era una ninfa sacerdotisa de
Dionisio, que tenía celos de la belleza de la joven, por lo que la maltrataba de manera física y
verbal, incluso se menciona que solía encargarle tareas pesadas.
Un día sus celos y sospechas de Dirce sobre que Antíope tenía una aventura con su esposo
llegaron al limite a lo que, iracunda acusó de manera directa a Antíope sobre sus sospechas, a lo
que después de incluso haberla golpeado la llevo al sótano y la encerró con la intención de que
ahí muriera, pero después de varios días la joven logró escapar y escapó en dirección a Citerión,
donde sus hijos, Anfión y Zeto se encontraban. Sus hijos, al verla de aquel modo y escuchar su
historia reclamaron venganza hacia Dirce. De este modo los humanos se encaminaron a Tebas
donde destronaron al rey Lico, mientras que en cuanto encontraron Dirce, se dice que la
golpearon hasta doblegar su fuerza y después la ataron al toro Fernesio que la arrastró por gran
distancia destrozando su cuerpo, para después ella morir debido a las heridas que obtuvo.
Los hermanos finalmente dejaron el cuerpo en un lugar apartado el cual consideraron nadie la
encontraría, y de este lugar brotó un manantial al cual nombraron “la maléfica ninfa”.
Cuando Dionisio se enteró de la cruel muerte de su sacerdotisa, el dios Dionisio en venganza
lanzó un hechizo contra Antíope la cual se volvió loca y comenzó a vagar sin rumbo por toda
Grecia.