La evolución de la grafomotricidad desde los cero a los seis años es la siguiente:
A los 18 meses, el pequeño comienza a auto expresarse gráficamente realizando sus
primeros garabatos descontrolados.
A los 20 meses, el codo comienza a funcionar provocando la aparición de los
garabatos denominados “barridos”. El niño no observa lo que hace. Más tarde el
garabato se hace circular
A los 3 años, aparece la coordinación óculo-manual y entra en juego la percepción. El
niño mira lo que dibuja y trata de controlar el movimiento de la mano. Empieza a no
salirse del papel.
Entre los 4 y los 6 años, según el grado de madurez del pequeño podemos ver cómo
unos no dibujan ni brazos ni manos, y a la cabeza tan sólo le pone los ojos, mientras
que otros dibujan brazos, manos, nariz y dedos.