MIS HISTORIAS MARRUECAS LIBRO de HISTORIAS MARRUECAS | Page 66

ropaje marroquí, chilaba, babuchas, tarbuch o Fez, (gorro color rojo), y con sus utensilios auténticos, ofreciendo a la clientela unos verdaderos “pinchitos morunos”, como los que se ofrecen a su clientela en todo Marruecos. Riquísimos de verdad con su intenso aroma de aliños auténticos y una humareda que olía a gloria. Como soy un adicto a este suculento manjar, que muchísimas veces he saboreado en el cercano país africano, le pedí al joven marroquí unos cuantos pinchitos que amablemente comenzó a preparar… al hablarme creí reconocer al encartado y comencé a recordar…De pronto me vino a la memoria…le hable algunas palabrillas que recuerdo en árabe, (en arbía como se decía allí). Me contestó también en marroquí…y le dije en castellano…- ¡Tu eres el Zapa!...el contestó…- ¡Sí señor!...así me llamaban. Entonces le dije quien era yo, y... ¡me reconoció!… Era un compañero de la “mili”, en el entonces llamado Protectorado Español de Marruecos, en el Grupo de fuerzas Regulares Indígenas de Arcila núm.6. Lo del nombre del Zapa, era porque había sido zapatero, en su ciudad natal de Tetuán. Español por los cuatro costados. Era un personaje muy simpático que se hizo muy popular en el Campamento de Instrucción en un poblado llamado T, zenín del Sidi Yamani, allá por el año 1952. Hacía pues veinte años los que habían transcurrido. Nos dimos un abrazo, recordamos algunas cosas de nuestro tiempo y de algunos compañeros que conocíamos, me habló de su vida…bastante accidentada, me invitó a saborear sus ricos PINCHITOS…ricos de verdad, quedamos en vernos en los próximos días que duraba las fiestas de San Juan. Como así ocurrió, hasta su marcha. Al cabo de los años me lo volví a encontrar en el encantador pueblo costero de Almuñécar, regentaba entonces un Bar en 66