MINERVAS Septiembre 2013 | Page 19

COMUNICACIÓN DE GNOSIS UNIVERSAL! de los límites [Kudurru] del siglo XII a. c. (ver: Piedra del Rey babilonio de Susa Melisipak II, 1500ª.c. Louvre). Sin embargo, es en el Génesis, donde ya se nos señala a la Luna como lumbrera menor y señora de la noche (Génesis 1:16). Compartiendo similitudes recordemos en este preciso instante, el enorme disco esculpido de la desmembrada Coyolxauhqui, diosa de la Luna, en el Templo Mayor de la ciudad de México. Figure 4 Coyolxauhqui, deidad Azteca En toda Mesoamérica, existía cierta tendencia de asociar a la luna con el conejo. Forma esta, que se puede evidenciar y apreciar claramente entre el juego de sombras y luz de la luna. Por otra parte, en la extraordinaria iconografía Maya, una hermosa mujer como diosa lunar frecuentemente aparece sentada en arquitectura del Arte Operativo catedralicio medieval de los Maestros Sculptores Lapidum Liberorum, extendiendo ampliamente entre sus principios espirituales el lema de fundamento; Ex Uno Omnia. Para el Dr. S. Brent Board. Durante la época operativa estos símbolos se estudiaban por los maestros arquitectos y se plasmaban en el piso con tiza. Morris: “Freemasons obviously knew “secrets” of geometry and architecture that enable them to build the soaring gothic cathedrals’’ (Freemasonry, pág 9,2006). También para A. G. Mackey: “La adaptación de la luna en el sistema Masónico como símbolo es análoga, aunque difícilmente pueda derivarse del empleo del mismo símbolo en las religiones antiguas’’ (Enciclopedia de la Francmasonería; Tomo III pág. Figure 5 Ejemplo de un "Tracing Board" de Primer Grado 894). Esta analogía y adaptación se evidencia dentro de la masonería por sus diversas