MINERVAS Abril 2013 | Page 6

COMUNICACIÓN DE GNOSIS UNIVERSAL! ABRIL, 6013 A.L. EL OJO TODO VIDENTE DE DIOS Por: Gustavo Páez M:.M:. R:.L:. Regeneración No. 31 de los Valles de San Juan, P. R. El Ojo de Dios es uno de los símbolos más importantes y esotéricos de la Kabbalah. Siendo central en mucho de sus tópicos y argumentos rabínicos, tenemos que explicar que no es exclusivo de la misma y que bien puede tener su origen en estructuras místicas mucho más antiguas. Por ejemplo, los sumerios poseían dos ejemplos de símbolos oculares poderosos. Por un lado tenían al dios Ninigiku, quien era el gran dador de vida, animando la forma de los seres por medio de su mirada y por otro lado poseían el símbolo del Ojo Que todo lo Veía, el cual representaba una expresión de omnisciencia, poder y vasta comprensión. A este ojo, que pertenecía al orden cósmico y no a una divinidad en particular le llamaron Ashar; que se puede traducir como el Ojo Flamígero. Por otro lado, los Para los judíos el Ojo Todo Vidente se conoce como el Gedul Ayin o el Gran Ojo y posee varios significados dependiendo del marco cultural con el que se estudie. Para el pueblo en general este Ojo Divino era una expresión del Ojo Protector de Dios que vela por encima del pueblo, ojo al que los salmistas le han dedicado pasajes en donde inclusive piden al Todopoderoso que abra su ojo y los favorezca. De esta forma, el pueblo en general, consideraba el ojo como una estructura protectora que les guardaba del mal y les favorecía en toda empresa. No obstante, para las ramas sacerdotales el Ojo de Dios representaba otra cosa. Para estos, el Ojo Divino es una representación de la Fuerza Creadora en su acto de proyectar los diez tipos de luces al mundo, que eventualmente crearan las Emanaciones del Árbol de la Vida. Es por esto que se ve en misterio que de este ojo surgen unos rayos que descienden al mundo. Estos rayos son la expresión de las diez luces místicas y cósmicas que bajan del Araboth, o Cielo de los Cielos. ESTE OJO, QUE PERTENECÍA AL ORDEN CÓSMICO Y NO A UNA DIVINIDAD EN PARTICULAR LE LLAMARON ASHAR; QUE SE PUEDE TRADUCIR COMO EL OJO FLAMÍGERO egipcios poseían divinidades que también eran representadas por un ojo magnifico. Por un Lado estaba el Ojo de Ra, por medio del cual el universo se constituye y por otro lado el Ojo de Horus, que era una expresión del poder solar y las maravillosas cualidades de la Luz. Muy posiblemente, los hebreos en su origen tomaron estas enseñanzas antiguas y a la luz de la Kabbalah las elaboraron más. Sin embargo, para los estudiosos de la Kabbalah, este ojo tiene unas representaciones todavía más profundas. Por un lado los rabinos discuten que por medio de las magnitudes cósmicas, místicas y mágicas de este Ojo, el mismo posee las capacidades de mostrar los secretos de la Alta Iniciación dentro del trabajo de la obtención del Alma Divina. Es decir, quienes logran entender este misterio pasan a recibir la bendición del Eterno y de esta forma se convierten en seres sostenidos por Dios y pasan a habitar sobre las esferas celestiales. De la misma forma, se hacen uno con el Alma Universal y se comparte con Ésta la Sabiduría Secreta que brota de la Columna Derecha y de la Columna Izquierda del Templo Sagrado del Señor. Por otro lado, El Ojo Divino, representa la unión filosófica del Fuego Divino de la Luz, El Viento Divino de Su Espíritu y las Aguas Celestiales de su Cuerpo. Cuando estos tres se unen producen por ext V