Military Review Edición Hispano-americana Enero-Febrero 2015 | Page 84

alcantarilla. Dirigió a las tropas de Birdwell a una posición donde podrían enfrentar a los soldados enemigos. El enemigo jamás supo lo que le había golpeado. Al día siguiente, Otis felicitó y elogió a los soldados de la Tropa Charlie pero jamás se atribuyó ningún mérito. El ejercicio del mando tipo misión. El estilo de liderazgo de Otis causó una impresión duradera en un comandante de la Tropa B. A veces, Otis viajaba con las tropas cuando estaban protegiendo la carretera principal entre Saigón y Tay Ninh. Antes de desplazarce de una posición a otra, el nuevo comandante de tropa quiso dar una presentación de información a Otis sobre sus planes y avances. Otis escuchó la primera presentación del nuevo comandante de tropa. La segunda o tercera vez que el comandante comenzó a dar una presentación de información, cuentan que Otis lo interrumpió. Otis le explicó que le había asignado una misión al comandante de tropa que él mismo consideró adecuada. Otis dijo que no era necesario que supiera todos los detalles. Estaba disponible en caso de que sus comandantes necesitaran más recursos del escuadrón, o de la división para ayudarles en una lucha más amplia. De hecho, Otis dijo que todas las unidades de caballería llevaban a cabo las operaciones nocturnas de manera distinta. Lo consideraba algo positivo porque le presentaba un problema de imprevisibilidad al enemigo. En 1967, el Ejército sacó de la escuela a un joven oficial que estudiaba transmisiones y lo asignó como oficial de transmisiones del escuadrón bajo el mando de Otis. El teniente confesó su temor de quedar mal ante su nuevo líder. Otis se sentó a su lado, lo miró directamente a los ojos y le dio una palmada en la rodilla. Otis alentó al teniente, diciéndole que solo necesitaba seguirlo —y que estaría bien. El joven oficial confió en Otis. Con el tiempo, el teniente olvidó los nombres de todos los otros oficiales que conoció en Vietnam, pero recordó a Glenn Otis el resto de su vida porque Otis primero fue un hombre y después un coronel. Otis tenía buen sentido del humor. En un enfrentamiento con las fuerzas del Ejército de Vietnam del Norte en Hoc Mon en 1968, poco después de asumir el cargo de comandante del escuadrón, aterrizó cerca de uno de los tanques de la Tropa C. El comandante de tanque tenía un mono mascota atado con una correa a la cúpula. Cuando llegó Otis, el comandante estaba de pie a lado del tanque y el mono estaba en lo alto de la cúpula. Otis miró al comandante y, luego, al mo