Mictlantecuhtli número cero RevistaAntropologica2 | Page 7

Antropología, políticas públicas y bien común. “Si hubiera una ciencia de los seres humanos sería la antropología que apunta a la comprensión de la totali- dad de la experiencia a través del contexto estructural.” -Wilhelm Dilthey El presente texto pretende dar al lector una breve in- troducción a una de las labores antropológicas: la crea- ción de políticas públicas. De igual forma, desmentir algunas concepciones erróneas que se han hecho sobre los antropólogos, mismas que se han dado debido a la desinformación. Muchos aún tienen cierta concepción estereotipada del antropólogo; de lo que es, de lo que hace y, sobre todo, de cómo se ve. Se dice: El antropólogo se cree “indíge- na”, viste de manta, usa guayaberas con bermudas, es ecologista (y por eso no se baña), se la pasa comiendo hongos y fumando (no solo tabaco), lee a Marx y por eso siempre va en contra del gobierno; y, sobre todo, siempre está inmiscuido en revueltas. En conclusión, hippies contemporáneos. Lamentablemente bajo esta visión errona se pierde la esencia del antropólogo como científico social y, prin- cipalmente, humanista. En consecuencia, las aportacio- nes de la antropología en la resolución de problemas sociales muchas veces son poco valoradas o incluso, en peores escenarios, quedan en el anonimato o simple- mente son descartadas sin ser tomadas en cuenta. El antropólogo se dedica al estudio de lo humano y sus múltiples manifestaciones; la vida sociocultural, la cul- tura material, el cuerpo y la sexualidad. la memoria co- lectiva, el espacio social, la vida cotidiana, el flujo men- tal, conductual y comportamental. Todo esto no solo en comunidades en las llamadas “comunidades indíge- nas” como comúnmente se cree, al contrario, el campo antropológico es tan amplio que es posible estudiar lo humano desde todos los escenarios: urbanos, laborales, educativos, religiosos, económicos, etc. Con esta nueva visión de lo que el antropólogo hace y estudia es posible afirmar que la labor antropológica es sumamente importante en la creación de políticas pú- blicas que buscan el bien común. El estudio de cultural 1 2 ya no se reduce a una tarea meramente descriptiva, va más allá, busca dar respuesta a los problemas latentes. El antropólogo lee, escucha, observa 1 y finamente pro- pone. La cultura configura, en parte, el comportamiento hu- mano. En este sentido, es necesario decir que el ser humano está en constante proceso de enculturación. Dicho de otra forma: proceso de aprendizaje cultural. Dicha enculturación no siempre se realiza de manera consiente, ya que absorbemos información de todo cuanto nos rodea, alguna la adoptamos y otra es des- echada. 2 Siendo consciente de ello las acciones que toma el esta- do para procurar el bienestar ciudadano deben estar re- forzadas por estudios culturales previos. Cabe mencio- nar que cada estudio debe ser hecho a partir de zonas particulares, pues las necesidades serán distintas entre cada una. Propiciar elementos que ayuden al ciudadano a desenvolverse en los distintos ámbitos de la esfera pú- blica como lo son la educación, el trabajo, la recreación deportiva y artística, puede iniciar una sólida preven- ción social sin la necesidad de políticas represivas. Como es bien sabido, las políticas públicas son todas aquellas medidas y acciones que el estado hace para garantizar el bien de la ciudadanía. Desgraciadamen- te, en muchas ocasiones las decisiones tomadas por los dirigentes gubernamentales no siempre son acertadas y tropiezan con el vicio de implementar acciones represi- vas a las que de igual manera se les puede dar el nombre de políticas duras. Acciones sin fundamentos; políticas que aparentemente erradican el problema, pero que en realidad solo lo silencia efímeramente; medidas caren- tes de estudios sociales y culturales que brindarían un panorama cercano a la realidad subyacente y a la forma en que el humano se edifica en su entorno. Las políticas preventi vas no son fórmulas mágicas, los E. Restrepo. (2016). Etnografía: alcances, técnicas y éticas. Colombia: Envión Editores P.K. Bock. (1985). INTRODUCCIÓN A LA MODERNA ANTROPOLOGÍA CULTURAL. México: FONDO DE CULTURA ECONÓMICA