Los microorganismos presentes en el
intestino desempeñan un papel fundamental
en la salud digestiva e influyen
considerablemente en el sistema inmune, así
como en las funciones endocrinas afectando
incluso al sistema nervioso central. Se ha
estudiado que una composición variada y
correctamente equilibrada de la microbiota
resulta esencial para funciones adicionales a
la digestión. Por el contrario, una pérdida de
dicha diversidad junto con la aparición de un
desequilibrio en la microbiota intestinal o
disbiosis se relaciona con el desarrollo de una
amplia gama de trastornos como la obesidad
y las enfermedades subyacentes.
Desde otro punto de vista, los probioticos
también desempeñan un papel importante
debido a que subsanan la deficiencia de
ciertos grupos bacterianos que desarrollan
funciones importantes en el organismo,
como:
regulación
de
funciones
inmunológicas protegiendo el organismo
frente a infecciones y procesos de
inflamación crónica, en función a esta
relación se plantea el uso de estrategias
dietéticas destinadas a modular la
composición de la microbiota, basadas en
probióticos y prebióticos, contribuyendo al
control de los trastornos metabólicos de
forma más eficaz.
Microbiota intestinal
En el organismo humano se aloja una
comunidad microbioló gica diversa y
diná mica, se ha estimado que unos 1014
microorganismos residen en varias partes del
cuerpo, como en la superficie de la piel y los
tractos gastrointestinal, genitourinario y
respiratorio. El tracto gastrointestinal posee
el mayor nú mero de microorganismos; en el
colon, se encuentran más del 99.9% con un
fuerte predominio de anaerobios estrictos. En
la microbiota intestinal existe un equilibrio
entre las poblaciones bacterianas dominantes
(Bacteroides, Clostridium, Eubacterium) y
aquellas subdominantes, presentes en menor
cantidad. Cuando este equilibrio es adecuado,
la microbiota actúa como una barrera que
impide la multiplicación de patógenos y el
desarrollo de patologías gastrointestinales.
Los factores que facilitan el desarrollo
bacteriano son la elevación del pH próximo
a la neutralidad, la disminución de la
concentración de sales biliares y de restos de
secreción pancreática.
UNIVERSIDAD COLEGIO MAYOR DE CUNDINAMARCA
Facultad ciencias de la salud
Bacteriología y Laboratorio Clínico