Astrónomos Importantes
Johannes Kepler (1571-1630)
La ciencia contemporánea no hubiera sido posible sin Kepler gracias a sus tres leyes sobre el movimiento de los planetas alrededor del
Sol. Entre sus logros, además de los astronómicos, se cuentan los tratados de óptica, su defensa de la pluralidad de los mundos, su peculiar visión de un futuro de viajes espaciales y su anecdótica creencia en la ausencia de gravedad entre la Tierra y la Luna.
Isaac Newton (1643-1727)
Newton descubrió las leyes de la gravitación culminando la revolución científica que comenzó Copérnico. En su obra Principia Mathematica expuso las leyes que rigen la gravitación. De estas leyes dedujo la órbita de los cometas y explicó las mareas, además de establecer las bases de la física nuclear por la interacción de las fuerzas de atracción de las partículas.
Albert Einstein (1879-1955)
Einstein, el científico más conocido de todos los tiempos, estableció en 1905, mediante la teoría especial de la relatividad, que la velocidad de la luz es la velocidad límite del Universo y que la energía del movimiento incrementa la masa de un cuerpo, relación que expresó en la famosa fórmula E=mc².
El cielo siempre ha llamado la atención de los seres humanos. Su grandiosidad, los cuerpos celestes y diversos eventos que ocurren en el firmamento, ha motivado a observar el cielo desde la antigüedad, y en función de ello ordenar su percepción del mundo y del Universo. En un comienzo, los seres humanos sólo disponían de sus ojos como instrumento de observación, y de su imaginación para concluir por qué los astros se movían de cierta manera. El solo hecho que después del día viniera la noche, y luego nuevamente el día, ya era una situación especial y ameritaba explicaciones que hoy nos sonarían a fantasía. Pronto el hombre descubrió que muchos otros patrones -además del día y la noche- se repetían constantemente, y esto le sirvió para fines como la agricultura o la orientación.
Muchos años de observación sentaron las bases científicas de la Astronomía con explicaciones más aproximadas sobre el Universo. Sin embargo, las creencias geocentristas, apoyadas por los grupos religiosos y políticos con claros intereses de dominación, impusieron durante muchos siglos un sistema erróneo, impidiendo además el análisis y estudio de otras teorías.
Sistema Geocéntrico
Obviamente, tal como su nombre lo indica, la teoría geocéntrica ubica a nuestro planeta como centro del Universo. También conocida como modelo geocéntrico, modelo de Universo geocéntrico o sistema de Ptolomeo, la teoría fue desarrollada en la Antigua Grecia por un conjunto de filósofos y recibió su nombre luego de que Claudio Ptolomeo (90-168 a.C.) completara y plasmara estas interpretaciones en antiguos papiros para su obra El Almagesto.
No obstante, cabe destacar que los postulados esenciales de la teoría geocéntrica se remontan aún más en la historia, siendo ésta la concepción del mundo en el espacio que también se creía funcional en la antigua Babilonia, por ejemplo.
En el sistema descrito por Ptolomeo, las versiones del modelo geocéntrico funcionaban por esta compleja interacción entre círculos. Ptolomeo creía que cada planeta orbitaba alrededor de un círculo llamado epiciclo y a su vez, el epiciclo orbitaba en un círculo aún más grande llamado el deferente, todo girando así alrededor de la Tierra . El centro del deferente no sería la Tierra en sí misma, sino un punto cercano al punto medio de la distancia entre la Tierra y el ecuante. Con la idea del ecuante, Ptolomeo logró una perfecta solución para enfrentar las numerosas discrepancias y críticas que ya para entonces recibía el modelo.
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