_No lo estas arruinando. Sólo que quería que te dieras cuenta que puedes ser feliz y sentirte cómodo en una situación tan sencilla como esta, con dos copas de vino y esta hermosa tranquilidad que te ofrece la naturaleza.
Erick hace una expresión de asombro y se queda sin palabras, y con esas cristalinas lágrimas en sus ojos, abraza a Meredith.
Erick deja en su casa a la joven y le expresa con un tono de tranquilidad: Ojalá no sea la última vez que salgamos. Ella se le acerca y le da un beso en su mejilla y le dice: Eso espero. Y entra a su casa.
ESCRITO POR: CRISTIAN JIMÉNEZ QUIROGA-GRADO 1001