Versión pirata de WhatsApp que se lucraba de los usuarios fue descubierta en Colombia
Una versión pirata del servicio de mensajería fue puesta en evidencia en el país por parte de la misma compañía, la cual presentó una demanda internacional ante la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).
El problema se originó luego de que se conociese sobre la existencia de un dominio web que tenía la terminación .co (que hace referencia a Colombia) que estaba suplantando al popular servicio de mensajería.
Se trataba del portal en internet registrado con el ‘código de dominios nacional’ colombiano por parte de una organización radicada en Reino Unido ante el servicio de web hosting 1API GmbH.
Debido a la exactitud del nombre con el del servicio de mensajería, la compañía de origen estadounidense presentó la demanda bajo la representación de la firma de abogados Hogan Lovells el pasado 4 de agosto, según información conocida por Dinero.
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En el documento de reclamaciones el grupo de abogados destacó la notoriedad de la marca WhatsApp, una de las aplicaciones de mensajería móvil más populares del mundo que al día de hoy tiene más de 1.000 millones de usuarios activos mensuales en 180 países del mundo.
Así mismo, señaló que la compañía es propietaria de varios registros de marcas bajo la denominación WhatsApp en varias jurisdicciones en todo el mundo. Entre ellas, Estados Unidos, la Unión Europa y Colombia, desde el 21 de diciembre de 2011.
También es dueña de numerosos nombres de dominio con la misma marca como (Armenia), (Bélgica), (Chile), (Ecuador), (Alemania) y (Hong Kong).
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De otro, la OMPI reveló que el demandado registró el nombre de dominio el 25 de noviembre de 2013, tiempo en el cual pudo sacarle provecho a la marca de manera irregular.
La compañía alegó que el nombre de dominio era “confusamente similar” a su marca registrada. Del mismo modo afirmó que el demandado no tenía derechos o intereses legítimos con respecto al nombre de dominio.
“El demandado no es un licenciatario de WhatsApp, ni ha sido autorizado por el demandante para hacer uso de su marca registrada”, añadió el tribunal de Organización Mundial de la Propiedad Intelectual en su declaración.
Aunque una de las principales conclusiones fue que el dominio web fue registrado y utilizado de “mala fe”, dado que el demandado quería aprovechar su notoriedad de marca para ganar dinero.
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De hecho, la OMPI constató que el demandado quería atraer intencionalmente a los usuarios para obtener ganancias comerciales en Colombia a través de servicios de ‘pago por clic’.
Empresas expertas en seguridad informática como Eset, afirman que los usuarios, motivados por el deseo de ganar un beneficio o premio determinado en internet, en la mayoría de los casos terminan ingresando su número telefónico sin leer y de esta forma empiezan a perder dinero.
De hecho, los expertos de esa compañía explicaron que por cada mensaje que se envía a los teléfonos celulares, las personas pierden al menos US$1 en promedio, de los cuales el 50% le pertenece a los hackers.
Esta conducta “constituye claramente un uso de mala fe, dado que el demandado buscaba deliberadamente aprovechar la buena voluntad y la notoriedad de WhatsApp para atraer tráfico a su sitio web y aumentar sus ingresos”, dice el informe de OMPI sobre el caso de WhatsApp.
Frente a estas acusaciones, el demandado no respondió a las alegaciones, por lo que el tribunal de la OMPI infirió que carecía de derechos o intereses legítimos en el nombre de dominio.
En razón de los argumentos expuestos, la OMPI ordenó que el dominio web fuera trasferido a la compañía WhatsApp, poniendo fin a una cadena de estafas realizadas en internet con su nombre.