Sus Obras
Compuso 24 caprichos y 12 sonatas para violín, tres cuartetos para dos violines, viola y guitarra,
conciertos para violín y orquesta, entre los que se destaca el No. 1 en re mayor y el No. 2 en si menor,
La campanella y 60 variaciones con acompañamiento de piano y guitarra. Sus obras son brillantes y
tienen buena técnica.
Su técnica asombraba tanto al público de la época que llegaron a pensar que existía algún influjo diabólico
sobre él, porque a su vez su apariencia se notaba algo extraña y sus adelantos musicales eran una verdadera
obra de arte . Se decía que en la mayoría de sus apuntes aparecía una nota extraña la cual decía
"nota 13". Podía interpretar obras de gran dificultad únicamente con una de las cuatro cuerdas del violín
(retirando primero las otras tres, de manera que éstas no se rompieran durante su actuación), y continuar
tocando a dos o tres voces, de forma que parecían varios los violines que sonaban. Además en la mayoría de sus
espectáculos usaba la improvisación. Esto indica lo cercano que estaba su arte al mundo del espectáculo.
Además creó numerosas obras en las que involucraba de alguna manera a la guitarra, exactamente 200
piezas.