Mi primera revista ANAQUEL.29.JUNIO.2020.B | Page 62

IN MEMORIAM
Pues los chicos y chicas de 4º ESPA se han puesto en faena y han fijado sus
ojos en la selva amazónica; al otro lado del océano. Por allí vivía, soñaba y,
sobre todo, leía sin descanso, Antonio José Bolívar Proaño, El viejo que leía
novelas de amor… Aquel personaje inolvidable salido de la imaginación y
la pluma de Luis Sepúlveda soñaba con visitar ciudades europeas, conocer
nuevas gentes y revivir quizá alguno de los romances que con tanta devo-
ción había leído en las narraciones.
Dicho y hecho. La propuesta estaba clara: invitar a Antonio José a pasar
unos días en el pueblo o la ciudad de origen de cada uno de los alumnos. Se
trataba de que la invitación fuera lo más
sugerente posible; dar a conocer los
rincones, los paisajes y los aconteci-
mientos locales que más pudieran in-
teresar a una persona que vive en el
otro extremo del mundo y está aleja-
da por completo de nuestro mundo
particular.
El resultado ha sido de lo más llama-
tivo y más diverso. Tan diversos y di-
ferentes como son los paisajes y pro-
cedencias de los remitentes de San-
tander. Lo mismo podríamos encon-
trarnos con invitaciones a pasar unos
días en Santander, en Bezana, Liaño o Moscú, Ucrania o Rumanía.
Así que el destinatario de las sugerentes y simpáticas misivas habrá tenido
más de un quebradero de cabeza antes de tomar el barco o el avión y cru-
zar el Atlántico. ¿No os parece? Juzgad vosotros mismos y decidid cuál re-
sultaría el destino y la invitación más atrayente y bien escrita.
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