Mi primera revista ANAQUEL.27.SUPLEMENTO.CULTURAL | Page 31
LÁPIZ Y PAPEL
Las personas tenemos el deseo constante de superarnos, y muchas veces lo
vemos reflejado en otras personas, ya sea física, emocional, o intelectual.
Pero estos tipos de amor están muy lejos de nuestro alcance, y en realidad se
convierten en amores platónicos. En una verdadera relación amorosa, los
dos protagonistas deben amarse, respetarse y cuidarse mutuamente. A tal
punto ha de ser así que ha de entregarse enteramente todo lo que se tiene
por amor. Se ha de emplear toda la fuerza, el tiempo, los talentos; todo lo que
sea necesario para tener un futuro mejor, más solido y poder vivir
tranquilamente.
Pero también es cierto que hay que estar también
preparada por si no encuentran a esa persona
idónea. Puede haber situaciones fuera de nuestro
alcance, y lo ideal en esos casos puede ser echar a
volar la imaginación. En estos casos, lo que
debería
prevalecer
sobre
todo
es
el
amor
incondicional o fantasioso.
Este es un poco el trasfondo que se describe en la
leyenda de los Ojos verdes. El “loco” enamorado de
aquella mujer, que cumplía los “requisitos” de su
fantasía
particular,
se
dejó
llevar
por
su
imaginación creyendo que iba a estar con ella, allí a
la orilla del lago, donde el joven muchacho podía
contemplar, de manera fantástica, a su amada.
© slideshire
En La ajorca de oro, el amor del joven es tan
grande que no le importa en absoluto ni siquiera su
propia dignidad, ni el qué dirán de la gente, con tal de complacer a su amada.
El pavor que estuvo experimentando aquella noche acabó por volverle loco.
Pero todo lo vivió o sufrió por amor, y por hacer feliz a su amada.
Nancy Alvarado
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