Mi primera revista ANAQUEL.24.JUNIO.2019.b | Page 20

Relato breve Una pequeña desgracia; un curioso lance To da la gente se acercó para ver qué sucedía. Al parecer, una señora había dejado libre a su perrito en medio de la calle. Se había producido un percance con un joven automovilista, que venía por Cuatro Caminos a toda velocidad en su flamante Audi. Llega la policía para intentar aclarar la situación. Había gente en los alrededores bastante airada y nerviosa; querían explicar lo sucedido pero no se ponían de acuerdo porque tenían puntos de vista diferentes. Total, que la policía se centra en los dos involucrados en el accidente: el joven automovilista y la señora del perrito. Esta última estaba también bastante alterada; gritaba a los policías, casi invitándo u obligando a que detuvieran a aquel “insolente” conductor. O como mínimo, a que le pusieran una fuerte multa. El chico, aun más airado y nervioso, en modo alguno reconocía su culpabilidad y no estaba dispuesto a acatar ningún tipo de sanción, puesto que la culpable era la anciana; ella era la que tenía al perrito suelto y la que se atrevió a cruzar el semáforo cuando aún estaba en ámbar. El caso es que la tensión y el nerviosismo se habían adueñado de los 20 viandantes y curiosos que se encontraban en Cuatro Caminos. El perrito yacía herido en medio del pavimento, y esto hacía que afloraran los nervios y el histerismo. © y 123RF