Mi primera revista ANAQUEL.22.DIC.2018.PDF | Page 90

ENCUENTRO CON NARRADORES A quí sigo. Los dependientes, que son muchos, me alimentan, y por las noches juego a la play con los guardias jurados. Gano siempre. La verdad es que estoy encantado. Esto parece un sueño. Nadie me echa de aquí. No sé… Igual se piensan que no tengo casa. Tampoco me lo preguntan, aunque a veces pienso en mi madre, y me pregunto por qué no viene a por mí, como si se hubiera olvidado que tiene un hijo. Pe- ro, bueno, me pongo a jugar a la play y se me olvida. He probado todos los juegos, todas las consolas, hasta las que no se han estrenado todavía. Los dependientes son muy majos. Me traen la co- mida y no les importa que me quede aquí a dormir. Siempre se queda al- guno por la noche conmigo porque me da miedo. Esto es demasiado grande. Cada noche duermo en un sitio diferente. Un día, en un sofá; otro, en colchón. Me queda por probar las hamacas; tienen buena pinta. En fin, mola… Cuando venga mi madre, le voy a decir que se venga a vi- vir aquí. Además estuve buscando la salida y no la encontraba. Y nadie sabía cómo salir o no me lo querían decir. Así que me fui a disfrutar de las con- solas y a saltar por las camas elásticas, que las tengo todas para mí. Cuando me canso, me tumbó en el mejor sofá y veo la tele que quiero. Hay muchísimas… No echan dibujos, pero se ven tan bien que cualquier cosa me gusta. Y cuando llega la noche, me entra un poco el miedo. Voy a buscar a los guardias jurados, que no sé cómo se llaman, pero me llevo muy bien con ellos. 90