Mi primera revista ANAQUEL.22.DIC.2018.PDF | Page 61

ENCUENTRO CON NARRADORES
L
legó la hora de la comida, mi hermana y yo estábamos solos;
bueno, con nuestro vecino, al que mi madre había vendido
parte del salón. Él no nos dejaba verla. No entendíamos por qué. Noso-
tros la echábamos de menos, queríamos verla.
Estábamos en la mesa cuando mi hermana decidió no comer, le-
vantarse e irse. Estaba triste, quería estar con mi madre. Mientras se iba,
se me ocurrió un magnífico plan. Tenía que hacer todo lo posible para
poder estar como antes, en familia y en nuestra casa.
Entonces fui a buscar a mi hermana para contarle
el plan que tenía. Cuando entré a su habitación,
me sorprendió verla. Estaba en su cama, llorando
desconsoladamente. Me acerqué y le pregunté:
-¿Qué te pasa? No llores
Ella se abalanzó sobre mí y me abrazó. Me dijo
que ya no aguanta más estar en casa con ese señor
tan extraño. Entonces le conté lo que había pensa-
do.
orear
Al día siguiente, como todas las mañanas nuestro vecino se iba a
trabajar. Entonces cogimos un martillo y una pala para poder cavar un
hueco detrás del armario. Era el único modo de poder ver a mi madre.
Nicole Santana
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