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Finalmente, hemos liderado diversas iniciativas
de cooperación, que agrupasen no sólo a Centros
Tecnológicos sino a cualquiera que quisiese aportar
recursos e ideas a la crisis que se nos echó encima en
sólo unos días. Ejemplos como nuestra implicación
en los grupos de CoronavirusMakers, o en la actividad
tractora que hemos realizado en grandes empresas
para que la producción de respiradores fuese una
realidad a corto plazo ilustran esta capacidad de los
Centros Tecnológicos.
Actitud ON, relevancia, solvencia… ¿definen estos
adjetivos la capacidad de adaptación a la situación
de los CTs?
Por supuesto, si bien también debemos considerar
nuestra rapidez de respuesta y, sobre todo,
nuestra capacidad de entender las necesidades del
entorno social, empresarial y, en este caso, también
sanitario. Los Centros Tecnológicos, a mi modo
de ver, se caracterizan por detectar de forma muy
ágil las necesidades tecnológicas e innovadoras
de la sociedad y responder con celeridad a esas
necesidades.
Insisto en esta presteza porque esta crisis ha exigido
un grado de madurez en las organizaciones nunca
antes visto, y los Centros Tecnológicos han tenido que
anteponer el bien social a sus intereses. Combatir
el colapso hospitalario, atender las necesidades
urgentes de materiales, ha sido la hoja de ruta de
los Centros Tecnológicos en los meses más duros
de la pandemia, aun a costa de utilizar recursos en
actividades a las que les faltaba coordinación desde
otras instancias. Pero no podíamos esperar a que
hubiese un plan de acción completamente diseñado
y coordinado…
Esta rapidez en la respuesta no puede ser a costa
de la eficiencia y la calidad en los resultados.
Obviamente, debe generar un impacto real en la
sociedad, y ahí es donde me gustaría resaltar la
idoneidad de los adjetivos que proponías en tu
pregunta. Nuestra actividad no sólo ha sido cercana
y rápida, sino propositiva, relevante y de calidad.
Afortunadamente, esas son señas de identidad de
los Centros Tecnológicos desde hace mucho tiempo,
no sólo como respuesta puntual a esta crisis.
Cada caso, imagino, habrá sido muy particular
y distinto. En cuanto al CTCR y sus empresas, la
actividad se ha reconvertido mirando más allá
del sector calzado, por las necesidades implícitas
del propio entorno. ¿Cómo valoran ello desde la
Federación?
Para Fedit no ha sido una sorpresa, sino una
constatación de los valores del CTCR. Conocemos
a los Centros Tecnológicos y sabemos que el caso
del CTCR es extensible al colectivo de Centros
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