Mi primera publicacion Revista Chacra Abril Ed 1073 | Page 13
Casi como si fuera una segunda opor-
tunidad, hoy el gobierno y los diri-
gentes están obligados a replantear
las últimas semanas de su relación
y convertir en realidad lo que Alber-
to Fernández dijo el 1º de marzo, al
inaugurar las Sesiones Ordinarias del
Congreso.
“Frente a esta situación dramática de
destrucción, hemos elegido a la solida-
ridad como viga maestra de la recons-
trucción nacional. Al mismo tiempo,
estamos dejando atrás una política
económica centrada en la especula-
ción, para volver a poner el foco en
el trabajo y la producción”, sostenía
premonitoriamente entonces el Presi-
dente, antes de agregar que “la políti-
ca productiva debe tener una fuerte
PREMIOS Y CASTIGOS
Mientras atravesamos este cisne negro, el país se aleja cada vez más
de sus verdaderas posibilidades. Y esa tendencia seguramente persis-
tirá mientras se siga sin tener un plan estratégico de país que proyecte
las próximas décadas seriamente, y en tanto no se reedite la cultura de
premios y castigos que marque, otra vez, la diferencia.
orientación a impulsar las exporta-
ciones”.
También señalaba entonces que “en
este proceso de desarrollo económico
federal y en un marco de crisis fiscal
como el que vivimos, el campo debe
ser un protagonista importante. Que
el campo crezca es uno de nuestros
objetivos”.
La locomotora
Pocos suponían en aquel momento
cuán dramáticamente ciertas se volve-
rían aquellas palabras, pero tampoco
se podía prever la inmensa oportuni-
dad que se abre ahora para un sector
insustituible en cualquier lugar del
mundo y que -aunque va a resultar
muy golpeado por la realidad econó-
mica- tiene la capacidad de reaccionar
y convertirse otra vez en la gran loco-
motora que ayude a la reconstrucción
estructural del país, a menos que el
Gobierno se vuelva a equivocar con
la asignación de los magros recursos,
y con su política de “premios y casti-
gos”.
hay prácticamente solo dos sectores
imprescindibles: los medicamentos
y los alimentos, y ahí es donde “el
campo” tiene mucho para aportar,
dentro y fuera del país. Ninguno de los
dos rubros puede detener su marcha.