Mi primera publicacion La Revista del Infante 2018-2019 (3) | Page 138

La Revista del Infante 18/19 recibo que haya un día de la escritora y no del escritor, o que de cada mil charlas que se hagan en un centro educativo acerca de la violencia de género, haya una de violencia doméstica. 6. Existencia de una igual censura en el lenguaje. Si una persona fuese repudiada por emplear expresiones como "ser la polla" o "ser un coñazo" por considerarse discriminadoras, en caso de ser censuradas, deberían ser igualmente censuradas expresiones como "más simple que un tío" o dejar de emplear el término feminismo para referirnos a la igualdad entre sexos puesto que no todos los feminismos la defienden, en caso de no ser censuradas las expresiones que pudieran ser discriminadoras para un sexo, tampoco se deberían censurar las del opuesto. 7. Los hombres son iguales a las mujeres en lo que se refiere al ámbito laboral. Al igual que es inadmisible que una mujer cobre menos que un hombre por realizar el mismo trabajo que el varón, es intolerable que un hombre tenga menos posibilidades de acceder a un puesto de trabajo porque se necesite un mayor número de mujeres para tener mejor consideración en la sociedad. 8. Todos los hombres y mujeres deberán ser evaluados en función de sus capacidades y jamás de su sexo. Ningún hombre ni ninguna mujer podrá ser rechazado por el hecho de ser del sexo que sea. 9. Igual trato de los medios de comunicación al hombre y a la mujer. Si un hombre revindica un derecho o se dispone de datos de violencia doméstica sufrida por los hombres, el pueblo tiene derecho a conocerlos y los medios de comunicación la obligación de proporcionarlos. 10. Si no se cumplieran estos derechos del hombre moderno habría desigualdad, la sociedad caería en el descontrol y el hombre en la sumisión. Todos estos artículos deben ser respetados y puestos en marcha para conseguir la igualdad porque, vamos a centrarnos de una vez, la igualdad no se va a conseguir dándole las mismas armas a las mujeres que se le han estado dando a los hombres para someterlas, se consigue quitándole las armas a ambos bandos, solo así se igualará de una vez la balanza. Por supuesto, tampoco se consigue con la eterna palabrería, con los mensajes de twitter, o con ese "postureo" de nuestros gobernantes que ya he mencionado. Digo esto porque estoy seguro de que mucha gente al leer mi escrito me tachará de misógino, ultraconservador, facha y de extrema derecha, pero para demostrar que esto es una cuestión de coherencia y no de ser de un bando o otro, acabaré este ensayo adaptando una frase de uno de los hombres más de izquierdas que jamás han existido: "Hombres y mujeres del mundo uníos". IES INFANTE DON JUAN MANUEL DE MURCIA http://www.iesinfante.es/