Mi primera publicacion La Revista del Infante 2018-2019 (3) | Page 44

La Revista del Infante 18/19 HUERTO ESCOLAR Eloísa López Castaño Cada vez son más centros educativos que están poniendo en marcha huertos escolares y esto es debido a que son una estupenda herramienta de aprendizaje transversal. Permiten trabajar conocimientos y habilidades de distintos ámbitos y desde la asignatura de Ciencias Aplicadas I y II de la FP Básica de Informática hemos intentado trabajar muchos de los contenidos de la materia. Alimentación saludable. Hemos aprendido a comer de forma equilibrada. El cultivar sus propias hortalizas ha sido una buena manera de que se familiaricen con ellas y aprendan a valorarlas. Hemos fomentado que la alimentación sea variada, con un alto porcentaje de fruta y verdura. Además, el huerto ha resultado muy útil como complemento al trabajo en el aula sirviendo de apoyo al estudio de las ciencias naturales (contenido de la materia de ciencias aplicadas). Por ejemplo, para trabajar la diferencia entre verduras, frutos o legumbres, o el papel del sol, el agua y los nutrientes de la tierra en el crecimiento de todo tipo de plantas. Comprender la importancia de la fotosíntesis y recordar su funcionamiento es más fácil cuando puedes ver un ejemplo real. Desarrollar habilidades motrices Cultivar hortalizas requiere usar las manos para remover la tierra, así como utilizar instrumentos: desde palas o rastrillos a regaderas o tablas de sujeción para que una planta crezca enderezada. Es, por tanto, un modo de que los alumnos trabajen la motricidad fina mientras realizan una actividad educativa también a otros niveles. Además a lo largo de estos dos años nuestros alumnos han diseñado sus propias jardineras y las han fabricado a partir de madera de palets que ellos mismos desmontaron y construyeron. IES INFANTE DON JUAN MANUEL DE MURCIA http://www.iesinfante.es/ Promover el trabajo en equipo Para crear un huerto escolar, además de usar las manos, hemos puesto en práctica otras habilidades. Hemos seleccionado los cultivos en base a las condiciones de la zona, planificado las actividades necesarias para alcanzar el objetivo y coordinarnos sobre el terreno para llevarlas a cabo. Todo ello supone, por tanto, trabajar en equipo, o lo que es lo mismo: aprender a acatar y aplicar las directrices marcadas en ciertos momentos por el profesorado y, al mismo tiempo, saber coordinarse con los compañeros y compañeras, adquiriendo además cierta autonomía. Aprender matemáticas El huerto nos ha permitido trabajar simultáneamente distintos conocimientos. Hemos repasado actividades de cálculo y cuestiones de geometría y economía. ¿Cómo? Hemos calculado superficies y el número de cultivos que caben en una fila dejando determinada distancia entre ellas. Hemos calculado volúmenes de tierra necesaría así como cuestiones de economía al calcular el coste de producción por unidad, el coste de los materiales utilizdos, las horas de trabajo, el valor de ese tiempo, etc. Inculcan el valor del esfuerzo Si alguna vez has cuidado plantas, habrás comprobado la satisfacción de ver cómo tras