Lucha contra la natalidad
Con vistas de controlar la población, luchan contra la natalidad, lo cual es un requisito indispensable para eliminar el subdesarrollo; a mayor población habrá menos recursos y disminuirá la renta per capita. Para no hipotecar el futuro es necesario una política antinatalista no coactiva (a la fuerza no se consigue nada) y tomar medidas en este sentido sería la distribución gratuita de métodos anticonceptivos (preservativos, diu, y esterilización) que podía ser subvencionada por los países del norte tras haberse realizado importantes campañas de mentalización de la población.
Un papel muy importante en la política antinatalista de estos países es la celebración de Conferencias Mundiales sobre Población y Desarrollo organizadas por la ONU, la primera se celebró en 1974 en Bucarest, otra importante fue la México en 1984 y la última la de El Cairo celebrada en 1994 donde se puso de manifiesto la oposición de las autoridades islámicas y de la Iglesia Católica a la política antinatalista. Para otros el problema de la superpoblación es sólo económico, si el nivel de desarrollo de estos países fuera como el de los desarrollados, el comportamiento de la población sería también igual (poca natalidad y poca mortalidad).