Mi primera publicacion Especial Coronavirus - Page 46
NEREIDA LUJÁN
(Profesora)
En mi última clase que fue el jueves a quinta hora, estuve con 2º de Bachillerato hablando de la
corrección de nuestro último examen, un comentario de texto que habíamos hecho la semana anterior
y cuyo tema parecía un presagio: el alarmismo que los medios de comunicación estaban creando en
torno ¡¡al coronavirus!! Un ratito antes (los jueves entro a cuarta) había fichado y había visto una
botellita de alcohol para limpiarme las manos; otro ratito antes, en la reunión de departamento, me
comentaron que ya no habría semana cultural, ni olimpiadas, ni viajes; y un ratito después, ya en mi
casa, durante la sobremesa, antes de recoger a mis hijos en el cole, llegó la noticia a mi móvil: ¡se
suspenden las clases durante dos semanas!
Durante la primera semana los primeros días, dominados por la incertidumbre y el miedo, fueron
agotadores… ¿y ahora? ¿y si tengo que ir a trabajar, qué hago con mis hijos? ¿estado de alarma?
¿puedo salir? ¿teletrabajar? ¿cómo hago llegar las tareas a mis alumnos? ¿EVAGD? ¿Pincel Ekade?
Después de ir al supermercado con guantes, salir a aplaudir al balcón a las 7 de la tarde, enviar correos
a mis alumnos y a sus padres dando ánimos y marcando tareas, hacer vídeo llamadas hasta con mi
abuela de 85 años, jugar con mis hijos sin mirar el reloj y pensar que he estado más tiempo con mi
familia que en los 18 meses de vida que tiene mi hija pequeña, algo he aprendido.
IES TEROR