Mi primera publicacion Catálogo de Pensar coas mans | Page 60

La cestería, el arte de tejer fibras vegetales para la elaboración de cestos
y otros objetos, es una de las más antiguas técnicas artesanales emplea-
das por el ser humano; su origen, como el del tejido y el de la alfarería, se
remonta a la Revolución Neolítica.

En el caso de la cestería, debido a la fragilidad de los materiales
utilizados y a las condiciones climáticas y edafológicas de Galicia, apenas se
conservan muestras de épocas antiguas. Aun así, en los últimos años se han
encontrado restos de madera en entornos castreños y romanos en los que
se dieron condiciones especiales que han permitido la preservación de estos
vestigios orgánicos. Una de esas circunstancias es la carbonización, bien
porque la madera fue quemada en un hogar como combustible, o bien por
efecto de un incendio. Este es el caso de los restos carbonizados de un cesto
de la Edad de Hierro, aparecido en Castromaior (Portomarín, Lugo) y datado
alrededor del siglo ii a. c. Aunque son restos muy fragmentados, parece que
se trata de un cesto hecho con una técnica mixta que combina las vergas
para el armazón y las varas para el tejido. Asimismo, podemos documentar
el uso de la cestería a través de testimonios indirectos, como las impresiones
en arcilla de ramas entretejidas, las decoraciones de entrelazados talladas en
jambas y dinteles de piedra, o incluso por la aparición de alguna herramienta
como el bastrén del castro de Viladonga (Castro de Rei, Lugo): una cuchilla
de dos mangos para labrar la madera, que es un claro antecedente de la
misma herramienta empleada en la cestería para hacer las vergas.

Sin duda, la cestería ha sido una de las artesanías más extendi-
das por toda la geografía gallega. En nuestra sociedad tradicional los cestos
formaban parte de la vida cotidiana de las familias y constituían un ele-
mento auxiliar fundamental en las tareas campesinas, marineras y domés-
ticas. Además, las técnicas de la cestería se usaban para hacer todo tipo de
objetos, desde aperos agrícolas y artes de pesca hasta prendas de ropa y
juguetes.

Desde hace ya algunas décadas, la cestería tradicional ha sufrido
un notable retroceso debido a diferentes causas que afectan, por una parte,
a la obtención de la materia prima, como los incendios forestales que asolan
nuestros montes y la fuerte repoblación con eucaliptos, cuya madera no se
aprovecha para la cestería; por otra parte, el uso generalizado de cubos o
tinas de plástico en la agricultura y en la pesca, así como de cajas, también
de plástico y poliestireno expandido para el transporte y comercialización de
los productos agrícolas y marineros, ha relegado los cestos gallegos a sim-
ples objetos decorativos, que además tienen que competir con la cestería
procedente del mercado asiático, con precios mucho más baratos.
Pese a todo ello, todavía quedan artífices de la cestería en Galicia que
siguen apostando por esta artesanía y que optan, bien por el empleo de
materiales y técnicas tradicionales para reproducir las piezas tal y como
eran antiguamente, bien por una cestería contemporánea que fusiona y
experimenta con diversas técnicas y materiales para obtener nuevos objetos
con diferentes usos y aplicaciones.