Nuestro hogar es el primer espacio que conocemos y en el cual crecemos como seres racionales, capaces de aprender, de enseñar, de comunicarse, de desarrollar sentimientos. Dentro de un hogar existen distintos Roles o Papeles que son asignados a cada uno de los miembros de la familia, en la que los adultos son la figura de Autoridad y Respeto, y quienes imparten las distintas normas que buscan brindar una Buena Convivencia. Este modelo de autoridad dentro del hogar es el que luego se reproduce en mayor medida en la sociedad, y es por eso que es vital la convivencia dentro del ámbito familiar para aprender determinadas pautas de comportamiento que nos serán útiles toda la vida.
Lo fundamental para poder alcanzar una sana convivencia es que cada individuo cumpla con sus deberes y a su vez se le respeten sus derechos, sin esto se generaría un malestar y un mal clima dentro de un hogar o dentro cualquier otro ámbito en el que se viva.
Hoy en día es muy común ver que la sociedad se encuentra enferma llena de violencia odio, resentimiento y venganza, esto se debe a que se han valores tales como el respeto, la tolerancia, el diálogo, la fraternidad y la solidaridad frente a las necesidades de los demás. Cuando un conflicto se presenta se debe recurrir buscar una solución mediante el diálogo y los acuerdos, ya que debemos considerar que los implicados estarán en contacto permanente en forma diaria.