El animal, que había quedado varado en una playa, presentaba quemaduras por el cuerpo cuando Lorraine Culloch lo encontró.
Normalmente, cuando el navegador del coche nos juega una mala pasada y nos conduce hasta un lugar al que no pretendíamos ir, nos enfadamos. Pero eso no le ocurrió a Lorraine Culloch. A ella, su navegador, efectivamente, la dirigió a un sitio, en principio, no deseado cuando pretendía volver a casa tras fotografiar orcas en la costa de Aberdeen (Escocia). Pero cuando llegó allí vio que el equívoco había valido la pena. Y es que se encontró un delfín varado que estaba a las puertas de la muerte.
El pobre animal estaba cubierto de quemaduras y ampollas, por lo que Lorainne contactó enseguida con los servicios de emergencia, según explica el Huffington Post . Éstos decidieron quedarse toda la noche con el delfín, al que cubrieron con toallas húmedas, hasta que la marea subió. Fue en ese instante cuando pudieron devolver al animal al mar.
Culloch escribió en su perfil de Facebook: “Estos hombres y mujeres increíbles [refiriéndose a los servicios de emergencia] se quedaron toda la noche esperando y sin perder detalle del estado del delfín hasta que a las 04.00 am pudieron devolver el animal al mar”.