Marielalero Compilatorio 24 febrero 2011 - 20 julio 2012 | Page 190

Significa que la actual situación mundial remueve lo transcendido y al no poder recordar y asegurar el origen de estas sensaciones, nuestra mente tapa a través del abrumamiento y agotamiento lo que no quiere que veamos y percibamos con claridad lo que sigue aconteciendo. Mucho menos que recibamos a nivel consciente la asistencia remota dirigida por nosotros mismos y civilizaciones Luz de lo que tuvo que construirse provisoriamente como futuro inmediato. Entonces es comprensible que gran parte de la civilización, se sienta físicamente y energéticamente removida por los efectos y por los movimientos de este deja vu que ha entrado en pleno proceso de activación cronológica. Esto quiere decir que recibiremos sus efectos empezando por presenciar efectos extraños en el comportamiento del tiempo y en su rendimiento, notaremos contracciones del tiempo y proyecciones del tiempo. Un día o una noche puede que rinda más o rinda menos. Estos pequeños y grandes cambios afectarán notablemente nuestro biorritmo junto con ello el rendimiento psicofísico y cognitivo. Puede suceder, que algunas personas sientan la necesidad de irse a vivir a otra parte saliendo de las ciudades para dirigirse a lugares montañosos y naturales. Que sientan la inquietud de buscar información de cómo deben prepararse ante un evento natural o directamente sientan y perciban que algo se aproxima sin poder definir precisamente ¿Qué es? Todos los datos que sientan recibir es aconsejable que lo dejen plasmar con flexibilidad no se debe fijar la atención en lo que reciben como información desde el pensamiento como idea o como visión por que estarían bloqueando lo que transmite el deja vu. Todo lo que está aconteciendo a escala mundial en estos recientes 66 años forma parte de este proceso proyectado en efecto deja vu. Si la idea nos pareciera absurda y carente de fundamentación implicaría que nos estaríamos negando a ver y a creer lo que recibimos como datos e información que son comprobables a nuestros ojos y raciocinio. Seria contradecirnos y negar que a escala mundial millones de personas han sido abandonadas y dejadas en un marco socio–económico y cultural donde prima la pobreza la carencia y abandono de persona. Seria negarnos que nos estén llevando lentamente a disminuir nuestra calidad de vida perjudicando nuestras condiciones sociales y económicas donde el vale todo ha formado parte de la nueva conducta colectiva. El pensar con responsabilidad y serenidad nos v