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María continuaba en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia y su economía personal era muy ajustada, por lo cual ella la organizaba meticulosamente, sabía que los $5500 le alcanzarían para vivir 9 días y le sobrarían $100 (5500:600= 9) y que en un mes cobraría $13000 trabajando como camarera (650x20= 13000 / 650x5=3250x4= 13000).
La cautelosa muchacha no aceptaba ir a la casa del desconocido porque quería conocerlo un poco más, le daba mucha desconfianza y le parecía peligroso ir a la casa de un extraño. Pero, sí quería ser su amiga. Su nuevo amigo se llamaba Onofre, era muy buen mozo, poseía una melena exuberante cual león de la sabana, era trabajador, y muy estudioso como ella, también responsable y emprendedor.
Unas horas antes del encuentro, Onofre fue a la florería a comprar el ramo. Eligió uno hermoso que costaba $1750. Como no le alcanzaba para pagar el total al contado, decidió abonarlo con tarjeta en 5 cuotas sin interés, mientras pensaba y pensaba cuánto debería abonar en cada cuota. Se fue contento, hechizado e ilusionado al encuentro de la hermosa María. Durante el camino Onofre pensaba que le gustaría cantarle, algún día, una serenata; pero no sabía, siquiera, si le gustarían las flores.....y menos.... que le cante !!
Pensó que este sería un buen tema...
Tú, la misma
siempre tú
Amistad, ternura, que sé yo
Tú, mi sombra has sido tú
La historia de un amor
Que no fue nada
Tú, mi eternamente tú
Un hotel, tu cuerpo y un adiós
Tú, mi oculta amiga, tú
Un golpe de pasión, amor de madrugada....
Capítulo 2
María Va. Capítulo 2